Los pagos de dividendos a nivel global aceleran más de lo esperado ante la recuperación económica y podrían recuperar su nivel previo a la crisis del coronavirus en un año. En ese escenario, España muestra un crecimiento destacado y lidera, solo superada por Francia, el repunte de los pagos al accionista en la zona euro, según un análisis global de Janus Henderson. Después de que el mercado bursátil español fuera el más afectado por la Covid, ahora recupera brillo gracias, en especial, a la vuelta de sus grandes pagadores: Banco Santander, Inditex y Grifols, que han recuperado su dividendo.
En concreto, el importe total distribuido entre sus accionistas en el segundo trimestre fue de 4,3 millones de euros, más del doble que los 1,9 millones que se repartieron en el mismo periodo del año anterior. Es decir, supone un crecimiento anual de casi el 127%, mientras su tasa de crecimiento subyacente, el crecimiento general ajustado por los dividendos extraordinarios, las fluctuaciones del tipo de cambio, los efectos temporales y las variaciones en el índice, alcanza el 20,1%.
Se trata del segundo porcentaje más destacado de la zona euro, que lidera Francia con un repunte próximo al 200%. España no alcanza el trono europeo en la recuperación del dividendo porque "había menos terreno que recuperar frente a Francia". Durante el segundo trimestre de 2020, varios bancos españoles lograron realizar sus repartos de dividendos en el segundo trimestre de 2020 antes de que se anunciaran las restricciones normativas.
Aún así, supera de largo al resto de países con el euro como moneda que no alcanzan el 100% de crecimiento. Por detrás de España se sitúa Países Bajos, donde la retribución al accionista crece un 60,9%, seguido de Italia, un 42,9%, mientras que Alemania, queda lejos con un 37,2%.
A nivel general, el crecimiento responde al impacto que sufrieron los dividendos de las compañías por la crisis del coronavirus. De hecho, Francia y España fueron los mercados más afectados durante 2020. Ahora, el impulso viene de la mano de las empresas que "han efectuado sus distribuciones a tiempo este año, tras haberlas pospuesto hasta el tercer trimestre el año pasado". En el caso de España, se trata de la vuelta del dividendo de los grandes pagadores: Banco Santander, Inditex y Grifols.
La compañía de Amancio Ortega distribuyó en el mes de mayo casi 1.100 millones de euros. Los accionistas de Inditex recibieron 0,35 euros por acción en la vuelta del dividendo de la firma textil después de que en 2020 suspendiera el correspondiente al ejercicio de 2019 por la situación de la pandemia. Aún así, el importe de la firma que dirige Pablo Isla está por debajo del dividendo abonado con cargo a 2018 y a 2017.
Lo mismo ocurre con Banco Santander, cuyo dividendo no alcanzó el previo a a la pandemia y lo recuperó todavía sujeto a las condiciones del BCE. Aún así, repartió 0,0275 euros, "la cantidad máxima permitida de acuerdo con el límite establecido por la recomendación del BCE". El importe supuso un desembolso de casi 476,9 millones de euros. Por su parte, en junio, Grifols distribuyó más de 250 millones.
Las perspectivas para la mejoría de los dividendos lo que resta de año son buenas para España ante el elevado peso en el Ibex 35 del sector bancario y el levantamiento del veto del BCE a los dividendos de la industria, aunque todavía con restricciones. Según recoge el informe de Janus Henderson, "los límites a los dividendos bancarios tuvieron una gran repercusión en 2020 —los bancos representaron la mitad de la caída de las distribuciones mundiales el año pasado—, por lo que este sector es importante para entender la trayectoria de la recuperación general de los repartos". El sector bancario fue el que más incrementó sus dividendos, casi un 50%.
El nivel previo a la pandemia se recuperará en un año
Según las expectativas de Janus Henderson, los dividendos rozarán su nivel previo a la pandemia este 2021 y en 12 meses ya lo habrán recuperado. Durante este año, el importe retribuido al accionista a nivel global se elevará hasta los 1,39 billones de dólares (1,18 billones de euros) este año. El dato supone un importe solo un 3% por debajo del importe que se pagó antes de la crisis del coronavirus y la previsión mejora ligeramente, 2,2 puntos porcentuales, la perspectiva que había realizado la firma de inversión anteriormente para 2021, reflejando una recuperación más fuerte de lo esperado.
El análisis señala que el daño sufrido por los beneficios empresariales a causa de la pandemia fue "menos dramático de lo previsto", y las empresas se adaptaron con rapidez para minimizar el impacto de la crisis en sus operaciones. Pero, además, destaca que "el flujo de efectivo, necesario para distribuir dividendos, cayó menos en su conjunto que los beneficios". Las empresas también se vieron favorecidas por la accesibilidad de los mercados crediticios y los diversos planes de ayudas puestos en marcha por los Gobiernos.
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