El anuncio de Cepsa que, a primera hora de la mañana, ha comunicado a la Comisión Nacional de Valores que pospone su debut en bolsa ha provocado un enorme revuelo en el mercado. La compañía culpa a la inestabilidad reinante a nivel global de su decisión que, según fuentes del mercado, estaría motivada además por una demanda más débil de lo previsto y por la falta de visibilidad del petróleo a medio y largo plazo.
El precio del petróleo se ha resentido en las últimas semanas por el temor a una desaceleración global (ha caído casi un 2% desde principios de mes), la guerra comercial arrecia y Europa tiene importantes frentes abiertos por Italia o el Brexit.
Pero por encima de todo esto, las fuentes consultadas creen que Cepsa no iba a poder cubrir toda la opv como esperaba y que su precio iba a quedar en la parte más baja del tramo. El motivo, que los inversores institucionales ya cuentan en el mercado con una alternativa que les ofrece más fiabilidad, Repsol.
La compañía tenía previsto colocar un 25% entre inversores institucionales y limitaba a empleados el tramo minorista. La horquilla de valoración de sus títulos se había situado entre los 13,1 y los 15,1 euros, lo que ponía a la petrolera con un valor de mercado de entre 7.000 y 8.000 millones de euros.
En opinión de Sara Carbonell, de CMC Markets, es posible que algún inversor institucional se haya echado atrás por toda la inestabilidad existente a nivel global, incluso por la tensión abierta entre Oriente y Occidente a cuenta del asesinato en Arabia Saudí del articulista del Washington Post Jamal Khashoggi.
Mubadala, accionista único de la compañía desde 2011, es el fondo soberano de Abu Dhabi, que actualmente mantiene relaciones muy estrechas con el reino saudí.
Con el Ibex poniendo rumbo a los 8700 puntos y los mercados americanos a punto de perder la directriz alcista y la media de 200 períodos en gráfico diario, junto con la incertidumbre generada entre EE.UU. y Arabia Saudí que podría crear inestabilidad para el petróleo, "no tiene mucho sentido comenzar a cotizar y parece que la decisión es muy acertada", comenta Sergio Ávila Luengo, de IG Markets.
Con todo, le llama la atención que en un entorno de tensiones sobre el precio del crudo (con el problema del suministro Venezolano o las sanciones a Irán) que favorece al sector petrolero, finalmente la compañía haya pospuesto su debut. Bank of America Merrill Lynch aseguraba hace unos días que el precio del oro negro podría dispararse otro 12% adicional los próximos nueve meses. Se colocaría así en el entorno de los 95 dólares a finales del segundo trimestre.
Nicolás López de MG Valores incide en que el contexto internacional que ha llevado a Cepsa a dar marcha atrás no parece que vaya a mejorar pronto. Le parece lógico que, puesto que no existe ninguna urgencia para que la compañía debute en bolsa, es lógico que haya optado por esta alternativa si estaba viendo que tenía que rebajar su precio de salida.
Por su parte, Natalia Aguirre de Renta 4 cree que esta noticia es un síntoma evidente de las dudas que persisten sobre el ciclo económico, a raíz de las tensiones comerciales y la situación en algunos países emergentes, a lo que se suma en el caso europeo la situación política en Italia o el tema del Brexit.
En cualquier caso, se trata de una "mala noticia para el mercado en su conjunto", según Jesús de Blas de Bankoa Credit Agricole quien incide en que esta situación se ha repetido bastante últimamente (Azora o Testa Residencial son dos ejemplos de ello). Coincide en que es más que probable que los compradores estuvieran presionando mucho el precio a la baja.
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