GameStop busca sustituto para su presidente, George Sherman, para apuntalar su transición de minorista de videojuegos a empresa de comercio electrónico. Según recoge Reguters, la junta de la compañía cuenta con un cazatalentos ejecutivo para buscar a su nuevo presidente. La reestructuración de la directiva se produce ante la tendencia especulativa de sus acciones. A principios de 2021 experimentaron un 'rally' sin precedentes y respecto al año anterior su precio ya se ha incrementado casi un 4.000%, convertidas en la principal representación de las denominadas acciones memes.
De acuerdo a la información de la agencia de noticias, varios miembros de la junta ya han hablado con posibles candidatos de la industria del juego, así como de los sectores de comercio electrónico y tecnología. El cambio supondría la mayor reorganización de la compañía desde que Ryan Cohen, cofundador y ex director de la compañía de alimentos para mascotas en Internet Chewy, se unió a la junta directiva en enero. Su entrada impuso el cambio de cultura y estrategia en la firma.
El reemplazo de su CEO es el último de una serie de cambios perseguidos por Cohen desde que se unió a la junta de GameStop. El ex director financiero Jim Bell o el director de clientes Frank Hamlin son algunos de los altos ejecutivos que dejaron la empresa en las últimas semanas. Mientras, también se han producido entradas, como la de Jenna Owens, veterana de Amazon y Google, en el puesto de jefa de operaciones, lo que manda un claro mensaje de apuesta por el crecimiento y la transición hacia el comercio electrónico.
A Sherman, quien ha sido CEO desde abril de 2019, se le ha atribuido internamente la reducción de costes y la dirección de GameStop durante la pandemia que llevó a muchos minoristas a cerrar. Pero los 25 años de experiencia de Sherman han sido principalmente con minoristas tradicionales, como Advance Auto Parts y Home Depot, y su experiencia se considera menos relevante para la transformación digital.
Las acciones de GameStop terminaron cotizando el lunes con una caída del 11% a 141,04 dólares, lo que le dio a la compañía un valor de mercado de aproximadamente 10 mil millones de dólares. La acción se sitúa ahora en 141 dólares, mientras que alcanzó un récord de 483 dólares a finales de enero.
La semana pasada realizó una ampliación de capital, aumentando el valor de las nuevas acciones que puede vender de 100 millones a 1.000 millones de dólares, a medida que avanza para capitalizar un aumento en sus títulos desde el repunte impulsado por los comerciantes minoristas en enero. Ese rally ha fracasado en los últimos días. En Wall Street todavía hay dudas sobre la capacidad de la empresa para reinventarse.
