Los nervios en los mercados del gas natural en Europa vuelve a elevarse un día más conforme los planes de contingencia para suplir al suministro de Rusia a países como Alemania, Italia o Europa del Este no dan visibilidad y se eleva la incertidumbre de cara al invierno. La tensión se reproduce en plena época de construcción de reservas estratégicas en el Viejo Continente de cara al invierno por la falta de alternativas reales al preciado fluido, salvo el viraje hacia el carbón y el petróleo. También está cotizando al alza la renegociación de los acuerdos anuales de suministro que tienen cláusulas de actualización y que están provocando serias fricciones en los operadores.
Los futuros del gas natural TTF del hub de Róterdam se disparan este lunes por encima de 220 euros por MWh, un avance del 7% respecto al cierre del viernes. Es la cuarta sesión consecutiva por encima de la barrera de los 200 euros, algo que no ha sucedido nunca y consolida su precio en zona récord. Pese a que se trata de cotizaciones jamás alcanzadas en cierres de sesión, el gas aún está lejos del hito intradía de 345 euros que marcó el 7 de marzo.
La cotización más relevante es, sin embargo, la comparativa interanual puesto que el año pasado por estas fechas se pagaban apenas 28 euros por MWh en ese mismo mercado, que actúa como referencia centroeuropea. Ese encarecimiento del 700% comienza a aplicarse en los suministros de cara al invierno. Alemania ha aprobado ya un recargo por gas de invierno, que entrará en vigor en octubre para los hogares y empresas alemanes de 2,4 céntimos de euro por KWh, es decir, unos 24 euros por MWh.
El Gobierno de Olaf Scholz manejaba un rango de 1,5 a 5 céntimos (15 a 50 euros/MWh) que finalmente se ha quedado en el término medio. Con este nuevo impuesto se pretende compensar a las gasistas por el aumento del precio del gas. Hasta ahora, la mayoría de consumidores alemanes se habían mantenido protegidos del histórico encarecimiento de precios. Berlín se plantea incluso la rebaja o eliminación del IVA para neutralizar los efectos negativos que tendrá para hogares y empresas este salto de precios.
Conversaciones de España y Argelia
Mientras eso sucede en Europa, España sigue gozando de un escenario algo más benigno en cuanto de los precios de referencia si se compara con el TTF europeo debido a la aplicación de la excepción ibérica. El Mibgas, plataforma que mide los precios de entrada para España y Portugal, registró el pasado viernes un precio de 143 euros por MWh en la subasta diaria de este mercado, un 35% más barato que en Róterdam. En términos interanuales, el encarecimiento se sitúa cerca del 400%, o cinco veces más.
Las diferencias de precio suponen en elemento fundamental de fricción entre España y Argelia, el mayor proveedor de gas hasta el pasado diciembre. Las posiciones se han distanciado además con la crisis diplomática a tres bandas entre ambos países y Marruecos. En agosto de 2021, la renegociación del suministro de cara al invierno acabó con el cierre del gasoducto Magreb-Europa, en vigor desde el pasado 1 de noviembre.
La decisión ha reducido casi a la mitad el flujo de gas en el primer semestre de 2022. El Gobierno español confió en el aumento del suministro a través del Medgaz, el otro gasoducto argelino con España, y el de barcos metaneros con GNL (Gas Natural Licuado) después de intensos contactos diplomáticos y visitas de ministros españoles a Argel. Las conversaciones para respaldar a la española Naturgy en la renegociación del suministro no dieron buenos resultados y España aceleró la diversificación con importaciones desde EEUU, sobre todo, y Rusia, en menor medida.
Doce meses después, responsables de alto nivel de los Gobiernos de Argel y Madrid han vuelto a verse las caras después del viaje secreto de funcionarios españoles a la capital argelina el pasado viernes. Según se hace eco el diario Herpress, el avión Falcon 900 habitual de Pedro Sánchez y Margarita Robles aterrizó el viernes 12 de agosto a las 12:00 horas en una base militad argelina para emprender su regreso seis horas más tarde hacia Torrejón de Ardoz.
El encuentro, que no ha sido confirmado oficialmente ni ha trascendido su contenido, se enmarca en las tensas relaciones diplomáticas entre ambos países que han llevado a un bloqueo comercial en todos los ámbitos pese a la privilegiada asociación energética que mantenían en el pasado. Medgaz, que todavía supone cerca del 20% del gas que llega a España, está operado a medias por Sonatrach, la estatal argelina, y una sociedad conjunta entre Naturgy y el gigante estadounidense Blackrock. En medio del pulso por el gas, Italia, que recibe gas argelino ya hasta por 3 gasoductos, ha renegociado con Argelia para convertirse en el nuevo socio preferencia en Europa y reducir así su dependencia de Rusia.
Apenas tres semanas después de que la Unión Europea aprobase su plan para reducir el consumo de gas en un 15% desde agosto a primavera, los objetivos parecen más difíciles de cumplir este verano. "Con varias regiones experimentando olas de calor abrasadoras, los últimos datos confirman una mayor quema de petróleo en la generación de energía, especialmente en Europa y Medio Oriente, pero también en toda Asia", dijo la Agencia Internacional de la Energía (AIE) según una nota recogida por SPGlobal.
"La crisis de gas natural que se avecina en Europa ya está incentivando una sustitución sustancial de la demanda de gas por petróleo. Los miembros de la UE se han comprometido a reducir su demanda de gas en un 15 % desde agosto de 2022 hasta marzo de 2023. Estimamos que esto aumentará el consumo de petróleo en aproximadamente 300.000 barriles diarios durante los próximos seis trimestres", señaló la autoridad energética.
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