Nuevo movimiento en la carrera farmacéutica contra el Covid-19. El laboratorio británico GlaxoSmithKline (GSK) ha suscrito un acuerdo de colaboración con la firma biotecnológica alemana CureVac, pionera en el desarrollo de vacunas de código genético, la misma línea de investigación que usa las estadounidenses Moderna y BionTech junto a Pfizer.
El gigante farmacéutico invertirá 130 millones de libras (150 millones de euros) en la empresa germana a cambio de una participación del 10% en su capital, en el que participa con un 23% el Gobierno Federal de Alemania de Ángela Merkel. También forman parte de su accionariado desde etapas anteriores Bill Gates, a través de la Fundación Bill & Melinda Gates, y el holding inversor en farmacéuticas Dievini Hopp BioTech.
Según los términos acordados, GSK realizará una inversión de 130 millones de libras en CureVac, incluyendo un pago en efectivo por adelantado de 104 millones de libras (120 millones de euros) y un pago reembolsable de 26 millones de libras (30 millones de euros) por la reserva de capacidad de producción. La inversión valora el 100% de CureVac en 1.500 millones.
"Con esta colaboración, estamos ganando un socio de clase mundial cuya experiencia y presencia global nos permitirá desarrollar y traducir aún más el valor de nuestra plataforma en potenciales productos para el mundo", añadió Franz-Werner Haas, consejero delegado interino de CureVac. Asimismo, CureVac podrá recibir una serie de pagos en función de distintos hitos regulatorios por un importe de hasta 277 millones de libras (320, de euros) y 329 millones de libras (380, de euros) por hitos comerciales.
CureVac es una empresa líder en biotecnología en etapa clínica en el campo de la tecnología de ARN mensajero (ARNm) con 20 años de experiencia en el desarrollo y la optimización de información genética celular para fines médicos. Según explica la empresa en una presentación, el principio de su tecnología patentada es el uso de ARNm como soporte de datos para instruir al cuerpo humano a producir sus propias proteínas capaces de combatir enfermedades. En origen, CureVac enfocó sus desarrollos para terapias contra el cáncer, anticuerpos contra la gripe y enfermedades raras.
Objeto de deseo de Trump
Curevac es la biotecnológica que ha provocado un choque diplomático meses atrás entre EEUU y Alemania después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, moviese hilos para comprar la empresa con elevados incentivos económicos para el derecho exclusivo de una potencial vacuna contra el coronavirus por EEUU.
El movimiento provocó un gran revuelo en Alemania y malestar con Trump en el Gobierno Merkel, que finalmente acabó invirtiendo en la compañía y quedándose con el 23% de su capital por 300 millones de euros. La valoración 100% en junio se situaba en 1.300 millones tras la entrada del Gobierno federal y ahora sube a 1.500 millones con Glaxo (GSK).
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