Vídeo | Grifols, ACS, Ferrovial... el Ibex brinda con la revalorización del dólar

El euro ha tocado mínimos de dos años frente al dólar en 1,184 unidades en el arranque de la semana. La apreciación del 'billete verde' responde a la inminente aprobación del megaplan de estímulo lanzado por el presidente Joe Biden tras salvar el último escollo del proyecto en el Senado; pero también a la buena marcha de la vacunación en el país. Estas dos variables hacen prever una recuperación más rápida y con más intensidad de lo previsto en la primera economía del mundo, donde el mercado laboral empieza a dar ya síntomas más evidentes de avance. 

Un buen grupo de compañías del Ibex 35, con varios pesos pesados al frente, se ven afectadas de forma positiva por esta situación ante el enorme peso que tiene su negocio en el país en la cuenta de resultados -al vender en dólares, cuanto más fuerte esté la divisa norteamericana, más euros al recibirán al hacer la conversión-, pero también al abaratarse sus exportaciones fuera del área del euro. Entre ellas se encuentran Grifols, ACS, Ferrovial, Iberdrola, Santander, Repsol, Acciona o Siemens Gamesa. 

Entre las más beneficiadas por la fortaleza del dólar está Grifols. La biotecnológica catalana obtuvo en el año de la pandemia el 67,4% de sus ingresos netos en el país -un total de 3.600 millones de euros-. Esta misma semana ha alcanzado un acuerdo para adquirir el 56% del capital que aún no poseía de la estadounidense GigaGen, en una operación valorada en 80 millones de dólares -67,3 millones de euros-. La firma capitaneada por los hermanos Grifols pasa ahora a tener el control total de una empresa a la que se incorporó en julio de 2017 al hacerse con un 44% de su capital. Sólo unos días antes, la catalana cerraba la compra de 25 centros de donación de plasma en Estados Unidos a BPL, filial de Bio Products Laboratory, por 70 millones de dólares (305 millones de euros).

El cierre a cal y canto de las fronteras internacionales y las restricciones a la movilidad en el año de la pandemia golpearon al negocio de Ferrovial, para el que la actividad de sus aeropuertos y autopistas de pago es esencial. La multinacional de las infraestructuras y el transporte ha visto cómo Estados Unidos le reportó el año pasado el 74,4% de sus ventas en el área de autopistas, con un total de 206,8 millones de euros. Tanto la firma capitaneada por Rafael del Pino e Ignacio Madridejos Fernández, como ACS o Renfe son además referencia para el sector ferroviario estadounidense. Ferrovial y ACS (con un 39% de su facturación en EEUU) han entrado en la línea de alta velocidad de California, mientras que Renfe lo ha hecho como operador del AVE de Texas. 

Los planes de la Administración Biden de impulsar este segmento del transporte no pueden llegar en mejor momento. No ha sucedido lo mismo, sin embargo, con la licitación de la construcción y posterior explotación de la I-495 en Maryland, una de las mayores obras que estaban pendientes de adjudicar en el mundo valorada en unos 3.000 millones de euros y que ha sido finalmente para Accelerate Maryland Partners LLC, un consorcio que incluye a Transurban USA y a Macquarie Infrastructure Developments.

Es también estratégica la presencia y expansión en tierras estadounidenses para otro de los pesos pesados del selectivo español, Iberdrola, que ha registrado una cifra neta de negocio de 5.203 millones de euros en el último ejercicio en EEUU (el 15,67% del total). Su filial norteamericana, Avangrid, acaba de recibir el visto bueno de las autoridades para construir el parque eólico marino Vineyard Wind 1, que contará con 800 megavatios (MW) de potencia y será el mayor de cuantos opera en el país. Hace solo unas semanas eran los accionistas de la eléctrica estadounidense PNM Resources los que daban el 'sí quiero' a la integración en Avangrid. El pasado mes de octubre la eléctrica del Ibex anunció la adquisición de esta compañía de Nuevo México y Texas  por 4.317,5 millones de dólares (unos 3.663 millones de euros). 

Mientras, Acciona ha comenzado las operaciones en su mayor parque eólico del país, La Chalupa (en Texas), que cuenta con una potencia instalada de 198 megavatios (MW) a través de 63 turbinas de Nordex. De este modo, el grupo presidido por José Manuel Entrecanales supera ya los 1.000 MW de capacidad eólica instalada. Por su parte, Repsol, que está presente desde finales de 2006 en EEUU, cuenta allí con activos como Marcellus Shale, uno de los mayores campos de gas del mundo, Buckskin en aguas profundas del Golfo de México, o el descubrimiento realizado en Alaska en 2017, que ha sido el mayor hallazgo de hidrocarburos convencionales realizado en suelo estadounidense de los últimos 30 años.

En el caso de los dos grandes bancos españoles, la situación ha cambiado de forma radical para uno de ellos hace apenas cinco meses. A mediados de noviembre, BBVA anunció la venta de su filial estadounidense a PNC por 11.600 millones de dólares (9.700 millones de euros), una cifra que ha permitido a la entidad ingresar 6.300 millones de euros más de las estimaciones promedio de valoración para el negocio en EEUU que habían hecho públicas el consenso de analistas. En el caso del Santander, la región de Norteamérica le reportó el el 21% de su beneficio ordinario, con un margen neto de 6.379 millones de euros el último ejercicio.