En medio de un aluvión de datos macro negativos, el de paro de Estados Unidos ha insuflado algo de optimismo a unos mercados ávidos de cualquier noticia positiva. Los inversores toman posiciones en la renta variable europea, después de publicarse que la tasa de desempleo ha caído a su nivel más bajo en 50 años (3,5%). Esto, en el caso del Ibex 35, ha supuesto afianzar los 8.900 puntos, en el último día de su peor semana de los dos últimos meses.
El Ibex ha cerrado este viernes con un avance del 0,67%, hasta los 8.961,8 puntos, por lo que en la última sesión se ha acercado a la cota psicológica de los 9.000 puntos que perdía esta semana. De hecho, durante esta semana ha sufrido un castigo del 2,4% y vive, por tanto, su tercera peor semana durante este año, poniendo fin a cinco semanas consecutivas al alza.
En las últimas horas, otra referencia de la primera economía del mundo, el ISM del Sector Servicios, ha confirmado su peor registro desde agosto de 2016, cuando se temía una recesión global; esta mañana hemos sabido, además, que la confianza empresarial ha caído en Hong Kong a su nivel más bajo de los últimos siete años y medio, mientras las protestas políticas arrecian, lo que ha llevado a una sesión mixta en Asia (Hang Seng -1,4%; Shanghai -0,92%; Kospi -0,55% y Nikkei +0,32%).
Dentro del selectivo español, Amadeus, Inditex y Ferrovial han tomado la iniciativa entre los grandes valores y han sido las más alcistas, con subidas del 1,5% en el caso de la primera y de pocas décimas menos para las otras dos: la distribuidora de textil un 1,42% y la presidida por Rafael del Pino un 1,33%. En el lado opuesto de la tabla se han situado, sin embargo, Ence y Cie Mediaset, que retroceden un 1,91% y 0,9%, respectivamente.
La incertidumbre no se disipa
La incertidumbre no se disipa y esto marca el paso en la renta fija, donde los intereses de los principales bonos vuelven a caer: el del diez años español hasta el 0,12% y la del Bund germano hasta el -0,58%, lo que sitúa la prima de riesgo de nuestro país en 72 puntos básicos, ligeramente a la baja. La portuguesa se sitúa solo un punto por encima y la italiana ronda los 140 puntos básicos. Mientras, en el mercado de divisas, el euro se cambia a 1,0971 dólares, por lo que sigue mostrando cierta debilidad frente al billete verde.
En lo que respecta a la guerra comercial todo sigue abierto también. "China no interferirá en los asuntos internos de Estados Unidos y confiamos en que el pueblo estadounidense pueda resolver sus propios problemas", ha asegurado el Ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi." De momento, esa cierta calma se traslada al petróleo, donde el precio del barril de Brent para entrega en diciembre avanza hasta los 58,63 dólares; mientras que los futuros del crudo ligero West Texas se pagan a 53,12 dólares.
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