El Ibex acelera las caídas y se aleja de los 8.000 tras la inflación récord en EEUU

El Ibex 35 suma su cuarta sesión consecutiva de caídas, que se han acelerado tras conocer el dato del IPC en EEUU. La inflación en el país norteamericano ha marcado un nuevo máximo desde 1981. El principal selectivo español perdió un 0,9% y se aleja de los 8.000 puntos en línea con la tendencia bajista en el resto de Europa. Además, en las últimas horas su evolución se ha visto condicionada por las medidas anunciadas por el Gobierno español, que establecerá nuevos impuestos excepcionales y temporales durante 2 años. 

Los bancos y el sector de la energía han moderado sus pérdidas, aunque la incertidumbre persiste. Estos dos sectores han perdido algo más de 9.500 millones de euros en capitalización bursátil desde que en la pasada jornada, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciara nuevos impuestos para ambos sectores. A cierre de la sesión de este miércoles, la capitalización de los bancos que cotizan en el selectivo - Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell y Bankinter- alcanza los 97.055 millones de euros, frente a los 102.462 millones con los que cerró el pasado lunes. En el caso de las energéticas, su capitalización se ha reducido en unos 4.100 millones de euros, ya que tras el anuncio del nuevo impuesto cayeron en bolsa, pero con pérdidas más moderadas que los bancos.

Los analistas de Bankinter señalan que el Gobierno había adelantado ya la aplicación de un impuesto a las eléctricas pero destacan las pérdidas: "ponen de manifiesto la preocupación de los inversores ante la incertidumbre jurídica que generan este tipo de medidas", destacan en su informe de preapertura. Por su parte, respecto al impuesto sobre las entidades financieras señala que se desconocen los detalles, pero afirma que "la reacción del mercado deja claro que es una mala noticia para el sector porque es una medida controvertida que resta atractivo al sector: reduce la capacidad de generar capital en un momento macro incierto y la remuneración para los accionistas".

La bolsa española replicó el rojo de otras plazas europeas, mientras que Wall Street también registra pérdidas. Juan J. Fdez-Figares, analista de Link Securities, ya anticipaba que la inflación en EEUU iba a  mover los mercados, "tanto al alza, si es mejor de lo esperado o, incluso, está en línea, o a la baja, si supera las estimaciones de los analistas". Finalmente ha superado las expectativas, tras escalar hasta el 9,1%, nuevo máximo en más de 40 años. La reacción ha sido negativo incluso cuando la subyacente muestra cierta moderación, una décima por debajo del mes anterior, aunque también por encima de las expectativas. El IPC en EEUU anticipa nuevas subidas de la Fed, que se reúne este mes de julio. 

La reacción del mercado también ha provocado que el euro caiga por debajo de la paridad con el dólar por primera vez en 20 años, aunque la caída ha sido momentánea y la moneda europea se ha recuperado momentos después. Además, la renta fija, que había corregido las últimas subidas, vuelve a su tendencia alcista. Al cierre del mercado europeo caen las rentabilidades -suben los precios-. El interés del bono español se acerca al 2,2%, mientras que el 'bund' alemán cotiza cerca del 1,1%. En este escenario, la prima de riesgo español se sitúa próxima a los 111 puntos básicos. 

La publicación del IPC coincide con la rebaja del crecimiento previsto para EEUU por parte del Fondo Monetario Internacional. En concreto, ha rebajado en seis décimas, hasta el 2,3%, su previsión por el efecto que tendrá y está teniendo ya el encarecimiento de los precios, al debilitar el consumo y la inversión.

Por su parte, el precio del barril de petróleo Brent cotiza por debajo de los 100 dólares tras el fuerte desplome registrado este martes. El Brent se desplomó en otra jornada volátil marcada por la preocupación de los inversores sobre una posible recesión en las grandes potencias que socave la demanda de petróleo. No convencieron las predicciones relativamente optimistas presentadas hoy por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que pronosticó que el mundo consumirá en 2023 unos 103 millones de barriles diarios (mbd) de petróleo, un 2,7% más que este año.