Inditex afronta sus primeras cuentas sin Isla con la sombra rusa, china y de Shein

Marta Ortega, actual presidenta no ejecutiva de Inditex, y Oscar García Maceiras, consejero delegado, se enfrentan a su primer examen. Desde que el pasado 1 de abril, Pablo Isla diera el relevo a la hija de Amancio Ortega y a su número dos, asumieron la dirección del grupo textil en un entorno marcado por las presiones inflacionistas que amenazan con debilitar la demanda, la crisis de suministros y la salida del mercado de Rusia, donde más tiendas tiene fuera de España. Y, además, Inditex debe hacer frente a Shein, un competidor en aumento que ya arrasa en España. Pese a que los vientos en contra se acumulan, los analistas apuntan a un crecimiento de sus ventas.

Estas serán las claves que seguirán los inversores la semana que viene en la publicación de los resultados de su primer trimestre fiscal (del 1 de febrero a 31 de enero de 2022). Tras registrar un récord de beneficio en 2019, antes de la pandemia de Covid-19, la compañía busca batir los datos, después de que en su ejercicio fiscal 2021 se quedaron a las puertas. A su favor tiene su cuota de mercado y su capacidad logística. Ante la elevada inflación que amenaza con debilitar la demanda, el dueño de Zara o Massimo Dutti tiene capacidad para trasladar sus mayores costes a los clientes. Según un informe de UBS, el incremento de precios soportado es mayor que el de otros competidores. Además, un informe de Jefferies, añadía "su cadena de suministros única le permite vender moda de una manera más precisa y oportuna que sus pares" en un contexto de crisis de suministros.

Sin embargo, los efectos que deja en la economía la guerra en Ucrania y las consecuencias de la pandemia deslucirán el estreno de la nueva directiva. De forma concreta, Inditex se ve afectada por el cierre temporal de sus tiendas en Rusia, el segundo país con más establecimientos físicos y casi el 9% de su EBIT. A ello se suma la caída de las ventas prevista en China por los confinamientos impuestos, sobre todo en Shanghái, por la política de Covid cero. China no es solo clave para la producción, sino también por su consumo, que se ha visto mermado por los cierres. En el país asiático el gigante textil español tiene 303 tiendas, su quinto mayor mercado. El estricto control de la pandemia en la región ya provocó una caída "significativa" del tráfico en sus tiendas en su último trimestre fiscal.

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Ortega y Maceiras asumen el reto de dar continuidad a los logros de Isla y uno de sus puntos fuertes ha sido la venta online. En 2021 se disparó un 14% para alcanzar los 7.500 millones y ya supone un 25,5% de su facturación total. Precisamente a través de la venta online se hace fuerte Shein, su competidor chino que gana cuota de mercado y su facturación, cerca de 8.600 millones de euros, ya es superior a la que Inditex registra por Internet. Su popularidad queda reflejada en el número de descargas de su aplicación, en EEUU, por ejemplo, supera a redes sociales como TikTok o Instagram. 

Mientras el resto de compañías textiles apuestan por subir precios para compensar gastos, Shein logra ofrecer precios muy ajustados. Neus Soler, profesora de la UOC, explica que la clave está en que "no tiene los costes fijos que tienen las marcas con tiendas físicas, como Inditex o H&M (alquiler del establecimiento, personal, etc.)" y que conocen a los "grandes manufactureros chinos que producen private label (marca propia) para los grandes grupos". 

Pelea por el trono del Ibex 35

Pese a los riesgos del mercado, los analistas creen que pesarán más las reaperturas y la vuelta a la normalidad que incita a un mayor consumo. El primer trimestre fiscal del año pasado se vio todavía condicionado por cierres debido a la pandemia. Así, según datos de Refinitiv, el consenso espera un aumento del 93% de su beneficio neto, hasta 812 millones de euros, y que las ventas aumenten un 27% hasta los 6.200 millones. 

Las expectativas han dado alas a la cotización de Inditex en bolsa. Desde enero ha perdido un 23% de su valor y se sitúa como el segundo título más bajista del Ibex 35%, unas caídas que se iniciaron en noviembre tras conocerse el cambio en la dirección y se agravaron tras las dudas del mercado por la evolución de la economía. Sin embargo, las pérdidas de Inditex, que cotiza por encima de los 22 euros por acción, se han moderado tras cerrar el mes de mayo como su mejor periodo desde febrero de 2021. 

Las pérdidas que acumula en bolsa le hicieron perder su 'trono' como mayor capitalizada del Ibex 35 ante el 'sorpaso' de la eléctrica Iberdrola, aunque en las últimas semanas la distancia vuelve a reducirse. El valor total del grupo textil asciende a 68.785 millones de euro -en 2021 llegó a recuperar los 100.000 millones-, mientras que la empresa que dirige Ignacio Sánchez Galán vale en el mercado 69.590 millones.