Bankinter y Cellnex, destacados

La bonanza de los bonos convertibles abre oportunidades a los 'caza-gangas'

La emisión de convertibles en acciones en el último trimestre se ha disparado con 16.000 millones de dólares en abril y 25.000 millones en junio con lo que el mercado afronta un año récord.

Los convertibles pueden transformarse de bonos a acciones a vencimiento.
Los bonos convertibles pueden transformarse en acciones a vencimiento.
Vinky / Pixabay

El rally que ha experimentado especialmente las Bolsas de Estados Unidos ha provocado que muchos gestores de activos estén buscando oportunidades en otros segmentos que pueden arrastrar un mayor riesgo como es el caso de los bonos convertibles. Ante la probabilidad de que la volatilidad se mantenga elevada, la inversión en este tramo de la renta fija se sitúa como una alternativa para aquellos que pretenden cazar algunas gangas.

En tiempos de tanta incertidumbre, los inversores pueden valorar la opción de incluir bonos convertibles en sus carteras. Esa es una de las conclusiones que destaca NN Investment Partners. Además, los desarrollos del mercado desde que comenzó el coronavirus han confirmado la relevancia del enfoque de inversión de esta clase de activo, en opinión de estos analistas.

Cabe destacar que las deudas convertibles en acciones son unos activos de renta fija en el que se concede al poseedor de estos la posibilidad de canjear sus títulos por acciones de una nueva emisión de capital a un precio previamente fijado. A cambio, normalmente lo que se ofrece es una rentabilidad en forma de cupón que, en teoría, debe ser superior a la que se obtendría con el bono tradicional porque tiene más riesgo en el orden de prelación en caso de una bancarrota.

El contexto estaría invitando a la asunción de un mayor riesgo por mucha prudencia que se pueda tener a la hora de realizar las estrategias. Y es que se ha observado un fuerte aumento en la emisión de convertibles en el último trimestre: 16.000 millones de dólares en abril y 25.000 millones en junio, lo que equivale a más de 67.000 en total. Esto es aproximadamente dos tercios del promedio anual de la última década de alrededor, que se sitúa en los 100.000 millones de dólares.

La razón de estas nuevas emisiones tiene que ver con el hecho de que los convertibles ofrecen una forma rentable y flexible para que las empresas obtengan capital, ya sea para permanecer operacionales o para aprovechar nuevas oportunidades de negocios. De este modo, la volatilidad actual en los mercados de renta variable significa que el bono puede ser más atractivo que una emisión de acciones: las tasas de cupón más bajas para estos activos hacen que los costes sean mucho más baratos que los de la deuda directa.

Martin Haycock, especialista en Bonos Convertibles de NN Investment Partners, dice que alrededor de un tercio de los problemas recientes se relacionan con compañías que están en dificultades por la crisis actual, como las del sector de los viajes. Sin embargo, la mayoría de los emisores buscan capital para financiar su crecimiento.

Estamos interesados en este último grupo, que incluye compañías involucradas en ciberseguridad, en el negocio en la nube, baterías y atención médica, que verá un crecimiento en los próximos de tres a cinco años”, dice Haycock. “Es por eso por lo que es crucial adoptar un enfoque temático para navegar por los ciclos económicos e invertir en los convertibles correctos”, añade.

Por su parte, Tarek Saber, responsable de bonos convertibles de la misma gestora, resalta que está gestándose un periodo de bonanza de bonos convertibles, ya que cada vez más empresas ven el beneficio de emitir estos vehículos en el entorno posterior a la pandemia.

Esto es positivo para esta clase de activos y un número creciente de inversores está apostando por el riesgo-rentabilidad de los convertibles, al reservarles un hueco en en sus asignaciones estratégicas de las carteras”, explica Sabre. “Recomendamos asignaciones de entre un 3% y un 10%, dependiendo del apetito de los inversores”, agrega.

Bankinter y Cellnex, las más destacadas en España

Centrándose en el mercado español, hay algunas firmas que ya han apostado por este tipo de emisiones y que se sitúan a la cabeza. Bankinter, por ejemplo, ha sido la última en informar a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) del lanzamiento de una oferta de valores perpetuos eventualmente convertibles en acciones ordinarias de la entidad, con exclusión del derecho de suscripción preferente, por un importe máximo de 350 millones de euros.

La entidad que la emisión, eso sí, estaba dirigida “únicamente a inversores cualificados”, sin perjuicio de las restricciones de venta adicionales previstas en la documentación relativa a la misma.

No es el único banco que se ha movido hacia estas emisiones. BBVA lanzó una emisión de un bono contingente convertible en acciones (CoCo, como se conoce en la jerga financiera) verde, por un importe nominal de 1.000 millones de euros. Es una tendencia bastante clara que se está observando en el sector.

Asimismo, Cellnex realizó hace un año una emisión de bonos convertibles por 700 millones, tras haber asegurado una financiación de 2.700 millones de euros con un grupo de bancos para los proyectos Iliad y Salt.

Mostrar comentarios