La gestora Invesco redobla su apuesta por CaixaBank e invierte más de 230 millones

Invesco, una de las gestoras independientes de mayor tamaño, ha redoblado su apuesta por CaixaBank y ha aumentado su participación en el banco. La gestora estadounidense ha notificado a la CNMV que ha elevado su presencia desde el 1,003% hasta el 2,012% del capital. 

Invesco, por tanto, ha comprado un 1,009% del capital, por el que podría haber desembolsado un montante superior a los 230 millones, a precios de mercado, ya que CaixaBank cuenta con una capitalización de mercado superior a 23.300 millones de euros. 

La firma estadounidense, es junto con Criteria Caixa y BlackRock, los únicos tres accionistas significativos del banco. Aun así, el holding de inversión ostenta un 40% mientras que BlackRock posee un 3,429%, ambas por encima de la participación de Invesco. Además, a finales de marzo era su consejero delegado, Gonzalo Gortázar, el que decidía pasar de las palabras a los hechos y compraba acciones por 114.300 euros. 

Por Carlos Rodríguez

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CaixaBank se anota este jueves un rebote próximo al 4,5% y alcanza un precio de 3,85 euros por título, marcando mínimos desde abril de 2017, recientemente. El motivo de la recuperación bursátil de las últimas sesiones obedece a la vuelta a la calma política tanto en Italia como España. 

Las recomendaciones positivas de los bancos de inversión se imponen. Uno de los últimos en revisar el banco ha sido Bankinter que señalaba que "los fundamentales son sólidos y pivotan sobre el aumento de la actividad comercial y la mejora en los índices de calidad crediticia. El aumento en las ratios de cobertura nos invita a pensar en un mayor ritmo de venta de activos improductivos. La estrategia de inversión en BPI nos parece acertada, por lo que mantenemos nuestra recomendación 'neutral' con un precio objetivo de 4,75 euros por título". Por tanto, le revisa su valoración al alza desde los 4,60 euros anteriores y le asigna un potencial a doce meses próximo al 25%. 

Recientemente, la entidad catalana ha comunicado al supervisor de Portugal que ha convocado una junta de accionistas en la que votará la salida de la bolsa de BPI, banco portugués controlado por CaixaBank, y la limitación de los dividendos a un máximo del 50% de los beneficios. El banco ya había anunciado sus planes para retirar del mercado a la lusa, de la que ya controla más del 94% del capital y aspira a hacerse con el 100%.