Ken Griffin acaba de comprarse la casa más cara de Londres (110 millones). También ha batido un récord con otra propiedad en Nueva York (210 millones). Ha salido su foto en todos los medios. Pocos sabrán que desde hace meses sus fondos son la peor pesadilla de la cadena de supermercados Dia, en cuya crisis ha 'pescado' decenas de millones de euros gracias a la posiciones cortas o bajistas que se revalorizan con la caída de las acciones. Y la empresa española no ha hecho otra cosa que caer en bolsa desde el verano de 2017 (-90%).
Buena parte de la culpa de esa celeridad la ha tenido Citadel. Más allá de la “agudeza visual de los bajistas” con la que sorprendía este jueves el presidente de la CNMV, Sebastián Albella, la potencia de fuego de los fondos de Griffin no tiene parangón en el mercado. Hasta tres ‘hedge funds’ distintos de Citadel venían operando a la baja con las acciones de Dia, donde ha llegado a acumular posiciones cortas del orden del 4%, según los propios registros del supervisor. Sin embargo, la opa de Fridman, adelantada por La Información, lo ha cambiado todo.
Citadel Multistrategy Equities Master Fund, el fondo insignia de bolsa de la firma de Griffin con sede en Gran Cayman, ha comprado el 1,23% de las acciones de Dia, en el lado alcista, en vísperas de su presentación de resultados. La operación no pasaría de anécdota de no ser porque la propia Citadel tiene otras dos firmas satélite en posición bajista pese que se han replegado tras la opa. Citadel Europe LLP (1,08% actual), Citadel Advisors LLC (0,4% actual) y Citadel Advisors II LLC (0,49% hasta noviembre) han operado en corto sobre Dia, según los registros de CNMV.
Entonces, ¿se han vuelto locos Griffin y sus gestores? No, básicamente es parte de su operativa cotidiana. La multiestrategia ‘long-short’ tanto al alza como a la baja, en acciones o en bonos es lo que le ha permitido obtener rendimientos próximos al 10% durante el último año en Citadel, por encima de la media de su sector ‘hedge funds’. La firma gestiona ya más de 30.000 millones de dólares en activos.
Griffin ha sido varias veces el gestor de fondos mejor pagado de la industria financiera -hasta 1.700 millones solo en 2016- o que en 2008 estuvo a punto de arruinarse en la crisis financiera. Se salvó, renació y es uno de los nombres más poderosos de Wall Street, obsesionado por el talento y por evitar el error, que lo mismo ficha para su equipo de economistas al expresidente de la Fed, Ben Bernanke; o al exGoldman Sachs, Ángel Ubide, cercano al actual presidente Pedro Sánchez.
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