Ninguna empresa ha quitado tanto sueño en 2019 los responsables de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) como Dia. El grupo de distribución que dirige el tándem Stephan Ducharme y Karl Heinz Holland vuelve a poner sobre la mesa una operación financiera que requerirá de la lupa del supervisor. Se trata de una macro-emisión de 6.055 millones de acciones de Dia, de las que 4.185 millones irán directamente a manos de Letterone en concepto de compensación por el dinero que prestó a la empresa antes de verano. La dilución superará el 90% para el actual accionariado de la empresa de supermercados.
Solo los accionistas minoritarios -que controlan todavía alrededor del 30% de la empresa- tendrán que poner dinero en la ampliación de capital de 605 millones de euros si no quieren diluirse. Letterone, el fondo controlado por Mijaíl Fridman, Petr Aven, Andrei Kosogov, Gerrman Kahn y Alexei Kusmichev, recibirá el 70% de las nuevas acciones a cambio de cancelar la mayor parte de dos préstamos participativos por importe de 490 millones de euros que concedió a Dia para repagar los bonos que vencieron en julio y evitar su quiebra.
Hasta el 82% del capital
El fondo se compromete a suscribir un máximo del 12% adicional también de la misma forma: compensando otros 71 millones de esos préstamos participativos que todavía permanecerían activos y, como mucho, pondrá 10 millones de euros adicionales si no llega con lo anterior. De este modo, Letterone suscribiría otros 810 millones de acciones de nuevo cuño. El objetivo es asegurar que la operación saldrá adelante y como mínimo se suscribirán 500 millones.
El primer paso para su realización ya se ha puesto en marcha. La compañía ha aprobado en Junta General de Accionistas (JGA) este lunes el inicio de una operación acordeón (reducción y ampliación del capital) que bajará el valor nóminal de las acciones de 0,1 a 0,01 euros. Dia también vaciará su 'reserva legal' por importe de 23 millones para compensar las pérdidas ejercicios anteriores y reducirá su capital actual.
La completa inyección de capital permitirá a Letterone mantener su 70% e, incluso, elevar hasta un tope del 82% su participación en la compañía de tiendas de alimentación. La dilución que sufrirá el actual accionista será similar a las registras en otras empresas en problemas como Abengoa o Duro Felguera. No obstante, la cotización de Dia comenzó a notar las ventas de los accionistas minoritarios y cayó un 7% el lunes, hasta 0,41 euros por acción, su nivel más bajo desde 2018 y, por tanto, desde antes de la opa que lanzó en febrero.
Letterone cuenta con informes de la auditora EY que respaldan la operación de compensación de créditos por acciones, aunque hay una condición legal (artículo 301 de la Ley de Sociedades) que debe cumplir: el 25% de los préstamos participativos deben estar en liquidez o vencidos. Según la documentación del fondo de Fridman, los citados créditos vencen el próximo 28 de noviembre y para entonces debe haberse realizar la ampliación de capital.
En realidad, la reestructuración accionarial que se va a llevar a cabo ahora es la que se aprobó inicialmente el pasado 20 de marzo en la primera de las tres Juntas de Accionistas de 2019. Aquel día, Letterone impuso su ley frente a la otra propuesta alternativa del anterior consejo de administración. Entre los requerimientos que planteó entonces el fondo de Mijaíl Fridman se encontraba el rechazo a la ampliación de Morgan Stanley, la refinanciación con la banca y el éxito en la opa sobre el 100% que lanzó sobre Dia el 1 de abril y que terminó el 20 de mayo después de dos prórrogas consecutivas. Todo se ha cumplido ya solo falta que Dia vuelva de forma definitiva a la normalidad.
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