La lira turca frena la sangría que le ha llevado en los últimos días a profundizar en sus mínimos históricos. La divisa se ha revalorizado casi un 20% en las primeras horas de negociación para cotizar a 12,7 unidades por euro y 11,5 por dólar, antes de reinvertir la tendencia.
La moneda emergente llegó así a acumular una ganancia superior al 60% desde la tarde del lunes, cuando llegó a cambiarse a 18 por dólar y 20,5 por euro tras varios días de bruscos desplomes. Con todo, el efecto se ha diluido a medida que pasaba la mañana y la lira ha perdido buena parte de lo ganado a primera hora.
La fuerte subida se inició después de que el presidente, Recep Tayyip Erdogan, prometiera que el Gobierno compensará a los ciudadanos con ahorros en liras las pérdidas que sufran por la devaluación de la moneda. "Si las ganancias (por intereses) en una cuenta de ahorro en liras son superiores a la subida del cambio de divisas, las personas se las quedarán. Si el incremento en divisas es mayor que las ganancias, se le pagará directamente al ciudadano la diferencia", aseguraba el lunes tras reunirse con su gabinete.
Erdogan explicó que el objetivo de la medida prometida es evitar la conversión a divisas de los ahorros en liras para protegerlos de la devaluación en un momento en el que la inflación es del 21,3% pero los tipos de interés fijados por el Banco Central se han reducido hasta el 14%, por lo que el dinero en una cuenta pierde valor.
Las palabras del mandatario provocaron un nuevo desplome de la divisa la jornada previa, cuando Erdogan aseguró que Turquía no dará un paso atrás en la estrategia de recortes de los tipos de interés, porque "estar en contra del interés" es la regla del Islam,
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