Reorganización accionarial

Mediaset España compensa a Italia con ProsiebenSat tras cancelar el dividendo

La compañía española supera la participación directa de su matriz italiana Mediaset Spa en el grupo de televisión alemán tras las  desinversiones de KKR y el consorcio checo que lidera Daniel Kretinsky.

Junta de accionistas de Mediaset España en Madrid.
Junta de accionistas de Mediaset España en Madrid.
L.I.

Mediaset España, controlada en un 50,2% por Mediaset Spa, se ha convertido en el ariete para atar en corto al grupo de televisión alemán ProsiebenSat (Pro7Sat). Después de la cancelación del dividendo en 2020 como medida precautoria por la crisis del Covid-19, la compañía italiana dirigida por la familia Berlusconi ha echado mano de la caja de su filial española para reforzarse en la alemana tras los recientes movimientos tectónicos en el accionariado que ha sufrido el dueño de los canales Sat.1 y Prosieben. De hecho, el segundo (Kretinksy) y tercer accionista (KKR) han vendido hasta el 7% de las acciones en la alemana a lo largo del último mes.

El pasado 21 de enero, Mediaset España comunicó a la Bafin (el equivalente a la CNMV española) la compra del 3,43% del capital de Prosieben por 103,9 millones de euros en operaciones realizadas “a mercado”, según confirmó la compañía a 'La Información'. Sin embargo, de forma simultánea, su matriz Mediaset Spa comunicó que cedía parte de su participación a través de derivados y acciones, cargando sobre la subsidiaria de Fuencarral el peso de su participación en el grupo bávaro y mayores costes de adquisición.

Mientras tanto, ese día ProsiebenSat presentó su avance de cuentas anuales de 2020. La participación total de las dos ‘mediasets’ pasó de reducirse del 24,15% al 20,2% para luego elevarse del 20% al 23,5%. Tras este movimiento, la filial española pasa a tener el 6,5% del capital de forma directa y mantiene un 6,65% adicional en permutas (swaps) y opciones de compra ‘call’. La matriz milanesa controla un 5,84% en acciones y un 4,5% en derivados, según los registros consultados por ‘La Información’.

Credit Suisse es el ejecutor detrás de este baile de participaciones a través una estructura de opciones 'call' que dan el derecho, pero no la obligación, a comprar 45,3 millones de acciones de Prosieben (el 19% del capital) en una ventana de tiempo que va desde mayo de 2021 a mayo de 2024. De hecho, el banco suizo declara esta posición bajo mandato de Mediaset para seguir suministrando acciones a demanda conforme el grupo decida elevar su posición directa en acciones. Ahora solo llega al 12,3% entre las dos 'mediasets' frente al 23,5% declarado junto a los derivados financieros.

El refuerzo de Mediaset España con 103 millones de euros se produce después de las ventas masivas realizadas en las últimas semanas por el segundo y tercer accionistas del grupo. El fondo de capital riesgo KKR vendió el 6% del capital que le quedaba en Prosieben el pasado 15 de enero por 206 millones, con una plusvalía de alrededor del 17% (31 millones) tras su incursión en mayo de 2020. Del mismo modo, Daniel Kretinsky ha comunicado el 2 de febrero la venta del 1,9% de Prosieben, con lo que reduce su posición del 9,8% al 7,9% del capital a través de Ruby Investment Sarl. El multimillonario checo ha disuelto el pacto de accionistas que le unía a sus socios eslovacos Patrik Tkac y Roman Korbačka.

Grupo ProSiebenSat.1 logró ventas de alrededor de 4.040 millones de euros en 2020 y un Ebitda (resultado bruto de explotación) de 700 millones de euros en su conjunto sobre la base de cifras preliminares y no auditadas. De este modo, el grupo ha superado significativamente su perspectiva anual, que se publicó en el informe del tercer trimestre de 2020, así como las expectativas del mercado. Para 2020 en su conjunto, ProSiebenSat.1 tenía como objetivo unas ventas consolidadas de entre 3.850 y 3.950 millones de euros y un Ebitda ajustado de 600 a 650 millones, después de que el negocio del Grupo se viera afectado por la crisis del Covid-19.

Sin dividendo para los minoritarios

Con la nueva inversión en Prosieben, Mediaset España ha comprometido ya 337 millones de euros en la compañía alemana tras sus respectivas operaciones de noviembre de 2019, marzo de 2020 y enero de 2021. El consumo de la caja española llega después de que en 2020 cancelase un dividendo previsto de unos 168 millones. De este desembolso, la filial española iba a enviar a Italia la mitad (84 millones de euros), aunque con el movimiento en Alemania compensa la ausencia de este pago. Los minoritarios, eso sí, se quedan como convidados de piedra.

La posición neta de caja de Mediaset España frente a la deuda neta de más de 1.000 millones de euros de su matriz italiana se ha convertido en un factor clave a la hora de seguir acumulando acciones de Prosieben. A 30 de septiembre de 2020, la caja de la filial española era positiva de 25,1 millones con un flujo de caja libre (free cash flow) en el mismo periodo de 119,8 millones. Será mayor a cierre de año, aunque sufrirá un bocado en el arranque de 2021 tras la nueva compra de acciones de Prosieben. En el primer trimestre de 2020, Mediaset España vació su caja y declaró una deuda neta de 18,8 millones por el impacto de la compra de otro 4,25% de Prosieben (61 millones), cuya financiación se hizo a crédito.

Mediaset Spa irrumpió en la compañía alemana en 2019, aunque en mayo de 2020 construyó una participación de control del 24% en mayo de 2020 a través de acciones y derivados financieros contratados con Credit Suisse. La compañía que capitanea Pier Luigi Berlusconi, hijo del ex jefe de gobierno italiano, ha acelerado su asalto a Prosieben en plena crisis de la Covid-19 y aprovechando el relevo en la cúpula directiva de la empresa. 

La televisión germana se había convertido en una pieza clave en la fallida fusión de Mediaset España-Italia con la creación del holding holandés MediaForEurope (MFE). El proyecto fue suspendido por los tribunales españoles con medidas cautelares tras la petición de Vivendi, el segundo mayor accionista de Mediaset Spa con un 28% y hostil a los Berlusconi.

El origen de sus litigios se encuentra en la guerra de poder por la incorporación de las llamadas 'acciones de lealtad' al gobierno corporativo de Mediaset. Se trata de unos nuevos derechos de voto que decantan la balanza del voto político en favor del principal accionista sin que tenga que poner más dinero, solamente por la permanencia en la empresa. Berlusconi usó este voto extra para sacar adelante la citada fusión de MFE, pero los tribunales ahora siguen analizando un proyecto que la propia Mediaset dijo que modificaría para volver a resucitarlo más adelante.

Inicialmente, los accionistas de Mediaset España iban recibir 2,33 acciones de la nueva empresa holandesa MFE por cada una de sus acciones. Entonces, Mediaset Italia prometió aportar al nuevo grupo su participación en la alemana ProsiebenSat.1 y preveía amortizar las autocarteras de Mediaset España (4,3%) e Italia (3,7%). Ahora, las acciones del grupo bávaro se encuentran repartidas aunque más cerca de Madrid que de Milán.

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