De más a menos. Los mercados se han tomado con escepticismo el nuevo paquete de estímulo de 1,9 billones de dólares comprometido por el presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, sobre todo después de que China se haya visto obligada a decretar nuevos confinamientos -afectan a 28 millones de personas- por el mayor aumento de casos del virus en diez meses. Además, el dato de ventas minoristas en EEUU tampoco ha sido positivo ya que han caído un 0,7% en diciembre, cinco décimas más de lo esperado. Todo ello provoca que Wall Street caiga en torno a medio punto porcentual.
Los números rojos han sido la tónica durante toda la sesión europea e incluso se han agudizado con el paso de las horas. El Ibex 35 se ha dejado un 1,69%, hasta los 8.230,7 puntos y su balance semanal es de una caída de un 2,1%. El descenso de este viernes ha estado en línea con las caídas que han registrado otras plazas del Viejo Continente como Fráncfort, París y Milán.
Los descensos de la bolsa española han estado liderados por los bancos. Sabadell se ha dejado un 5,43%, Caixabank ha cedido un 4,8% mientras que los dos grandes, Santander y BBVA, han retrocedido un 2,87% y 2,06%, respectivamente. Ninguno de los pesos pesados del selectivo han contribuido a reducir las caídas ya que Inditex ha cedido un 0,99%, Iberdrola un 0,75% y Amadeus ha caído un 1,92%. De hecho, solo una acción de las 35 ha acabado en positivo ya que Meliá Hotels ha avanzado un 0,26% mientras que Grifols ha cerrado plana e IAG ha cedido solo un 0,05%.
Los inversores se muestran cada vez más preocupados por la nueva ola de coronavirus que ha disparado los contagios a nivel mundial, obligando a endurecer de nuevo las medidas de restricción y que amenaza con torpedear la recuperación incipiente en algunas de las principales economías del mundo. Sin sorpresas en lo propuesto por el demócrata, se impone la cautela y la búsqueda de activos más seguros con los que protegerse hasta que escampe el temporal. En lo que respecta a las divisas, el euro corrige ligeramente a la baja en relación al dólar y fija su cruce en 1,2137 dólares.
Desde Link Securities sostienen, en relación con el modo en que los inversores han reaccionado al nuevo plan para EEUU que, "si bien puede haber algo en este comportamiento de 'comprar con el rumor y vender con la noticia' (...) el programa, que Biden pretende que sea apoyado por ambos partidos, incluye muchas de las propuestas de ayuda que habían venido proponiendo los demócratas en los últimos meses, pero, en algunos temas, sobrepasa lo estrictamente relacionado con la pandemia".
Dada la ajustada mayoría con que los demócratas cuentan en el Senado, su aplicación podría no ser tan sencilla. "Todo ello, unido a la cada vez más compleja situación epidemiológica en Europa y a los problemas que atraviesan gobiernos como el italiano o el neerlandés en estos momentos" supone un lastre para los mercados, tal y como apunta su responsable de Análisis, Juan J. Fernández-Figares.
En el mercado de materias primas, la posibilidad de que se produzcan esos contratiempos en la salida de la crisis afecta negativamente al precio del petróleo, en la medida en que se teme que pueda golpear de nuevo al consumo mundial de carburantes en un escenario de menor movilidad. El barril de crudo Brent, de referencia en Europa, retrocede más del 2% hasta los 55,1 dólares.
El crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) cae en la misma medida hasta 52,4 dólares. En lo que respecta a la onza de oro, activo refugio por excelencia, su precio cede un 1%, hasta los 1.828 dólares por onza. Mientras, en el mercado secundario de la deuda, la prima de riesgo española se sitúa en los 60,3 puntos básicos, con la rentabilidad del bono de referencia de nuestro país en el 0,055%.
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