Según BofA

Naturgy apunta a máximos desde 2008 al calor del gas pero pendiente de IFM

La compañía que preside Francisco Reynés presenta próximamente su plan estratégico, antes de que se conozca la decisión del Gobierno sobre la OPA del fondo australiano. 

El presidente de Naturgy, Francisco Reynés
El presidente de Naturgy, Francisco Reynés
Maximo Garcia de la Paz

La caída de Naturgy este jueves en bolsa, cerró en rojo al igual que la mayoría de valores del Ibex 35, no le hacen perder su tendencia alcista. El mes de julio lo ha empezado en verde y encadena cuatro meses seguidos de avances que le permiten recuperar su nivel previo a la pandemia. Pero su recorrido es largo y apunta a precios máximos desde 2008 impulsado por los precios del gas, que se han duplicado en 2021. Así, lo asegura un informe de Bank of America (BofA), que reitera su recomendación de compra, con un precio objetivo casi un 25% superior al actual, a la espera de "mejoras" en su próximo plan estratégico.

El punto fuerte de la energética en el año 2021 está siendo la apuesta en su negocio por el gas. El banco de inversión describe la tendencia de ese mercado como "parabólica", después de que sus precios para la entrega en 2022 en Europa hayan aumentado un 90% desde sus mínimos de 2020. En Asia el repunte es mayor y alcanza el 100%. Naturgy se ve beneficiada al tener "una de las mayores exposiciones al ciclo de precios del gas". En concreto, el informe señala que la relación del EBITDA a este sector "equivale a más del 50% de las ganancias consensuadas de este año". 

Este escenario le permite una revalorización superior al 15,5%, que mantiene gracias a la menor exposición a otros sectores más lastrados. Mientras,  empresas rivales del sector eléctrico, castigadas por los elevados precios de la luz, y o más expuestas al nuclear, afectado por el recorte a los denominados 'beneficios caídos del cielo' de etas empresas y de las hidráulicas, acumulan pérdidas anuales. Pero, además, BofA afirma que la cotizada española tiene capacidad de subir casi un 25% más respecto a su precio actual, con lo que alcanzaría los 27,4 euros por título, un precio que no registra desde el año 2008. 

El impulso definitivo puede venir de la mano del plan estratégico que la compañía va a presentar el próximo 27 de julio, a la vez que los resultados del último trimestre. "Esperamos que el plan estratégico dé alguna indicación de los planes de despliegue de capital" recoge el informe. Anteriormente, Naturgy ya sugirió la posibilidad de realizar adquisiciones complementarias y una "rampa en el gasto de capital en energías renovables".

Hasta ahora, su cotización está condicionada por la OPA parcial de IFM sobre el 22,69% de su capital, que a finales de este mes o principios de agosto debería recibir todas las autorizaciones (de la CNMV y el Gobierno) si fuera el caso. Pero con el nuevo plan, Naturgy busca enviar un mensaje al mercado, defendiendo una estrategia definida hasta 2025, independientemente del resultado de la OPA. 

Tendencia alcista pese a una posible retirada de la OPA de IFM

El pasado 5 de febrero IFM presentó ante la CNMV la solicitud de autorización, incluido el folleto, y a mediados de marzo, el fondo australiano ajustó el precio de la OPA como consecuencia del dividendo abonado por la energética a sus accionistas, quedando así el precio en 22,37 euros por acción. En total, el importe de la operación asciende a 4.921 millones de euros.

Sin embargo, la OPA está condicionada por la posición de CriteriaCaixa, brazo inversor de la Fundación La Caixa, que no solo no ha vendido su participación en Naturgy, sino que la ha reforzada, ya roza el 25,6% del capital, para asegurar la españolidad de la compañía. Este aumento le consolida como primer accionista de la compañía, por encima de los fondos CVC y GIP, que controlan un 20% cada uno. Aún así, aún tiene recorrido ya que el objetivo es situarse ligeramente por debajo del 30% del total. 

De producirse ese aumento, y teniendo en cuenta al resto de accionistas, el 'free-float' se reduciría. En ese sentido, desde BofA avisan que IFM necesitaría una tasa de aceptación "elevada para alcanzar su objetivo de participación del 17-23%". 

La dificultad de que esa aceptación sea masiva, hace posible que el fondo australiano eleve su oferta o, incluso, que la retirada. Este último caso, no lastraría su valor. "Creemos que las acciones podrían caer inicialmente, pero se recuperarán con fuerza a partir de entonces, ya que las buenas perspectivas del gas impulsan las revisiones positivas en las ganancias", recoge el informe que firma el banco de inversión.

Mostrar comentarios