Nyesa Valores, la inmobiliaria española con accionistas rusos, se desploma un 30% en la Bolsa española, hasta 0,004 euros, tras anunciar que después de reclasificar el Proyecto Narvskaia en Moscú como activo inmobiliario y deteriorar su valor en 45 millones de euros, las cuentas de 2019 de la sociedad registran un patrimonio negativo de 10,1 millones, por lo que se encontraría en causa de disolución.
En un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) este martes, la compañía ha explicado que el consejo ha acordado promover la presentación ante el Juzgado de lo Mercantil de una propuesta de modificación de su convenio de acreedores tras la entrada en vigor de las medidas en materia concursal aprobadas por el Real Decreto-ley 16/2020, de medidas procesales y organizativas para hacer frente al Covid.
"En consecuencia, la compañía está ultimando tanto la propuesta de modificación de su convenio de acreedores como el plan de viabilidad que la acompañará, con un nuevo planteamiento de quitas y esperas, y que a su vez incluirá una operación corporativa consistente en una reducción de capital mediante disminución del valor nominal de las acciones, junto con una ampliación de capital que revierta la situación de desequilibrio patrimonial", ha añadido.
El consejo "guiado por un criterio de prudencia" ha decidido clasificar el Proyecto Narvskaia en Moscú (Rusia) como una inversión inmobiliaria y deteriorar su valor por la diferencia entre el valor del proyecto de desarrollo que estaba registrado y el valor de mercado del activo en base al uso que tiene actualmente. "El Proyecto Narvskaia pasa a requerir financiación que, de
conformidad con las condiciones del mercado hipotecario ruso, pasaría por una ratio de apalancamiento no superior al 70% (a un tipo de interés aproximado del 11%), lo que conlleva unas necesidades de fondos propios que inviabilizan el desarrollo del proyecto en el corto plazo", alega.
Así, en las cuentas anuales correspondientes al ejercicio 2019 que han sido publicadas hoy, se ha registrado un deterioro de 45,6 millones de euros del valor de la inversión financiera de la Sociedad en su filial Marma. Como consecuencia, el patrimonio neto de la sociedad es negativo, en 10,1 millones.
Marma es la sociedad que absorbió Nyesa como parte de una ampliación de capital no dineraria y que dio entrada en el accionariado a socios rusos, actuales mayoritarios en el capital de la empresa. El capital de la inmobiliaria Nyesa está en manos de Mijaíl y Bella Gaber, que agrupan el 22,7% de las acciones. Les sigue José Antonio Bartolomé (21,4%) y Ruslan Eldarov, con el 8,8% de las aciones de la empresa.
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