Quadriga Asset Managers, la gestora de activos de Grupo Auriga, ha anunciado este lunes la comercialización del fondo ‘Quadriga Stable Return UCITS’, que tiene como primer objetivo alcanzar un patrimonio gestionado de 250 millones. Para ello, adoptará una estrategia conservadora de liquidez diaria que buscará generar retornos estables con un objetivo de rentabilidad del 5% por encima de la inflación, ofreciendo una alternativa y solución al problema de rentabilidades negativas del cash y la renta fija, artificialmente bajas del crédito o la pérdida de poder adquisitivo por inflación.
Quadriga Stable Return UCITS se lanzó en septiembre 2020 de forma privada con un compromiso de 40 millones de euros y ha generado una rentabilidad del 9,6% en 2020, destacando por su perfil de retornos estables y su baja volatilidad tanto durante los mercados hostiles de la crisis de la Covid-19 como los mercados alcistas del último trimestre, en línea con sus objetivos de inversión.
Con este lanzamiento, el equipo liderado por Diego Parrilla expande su oferta de soluciones líquidas 'antiburbuja', que cuentan con más de 400 millones de euros bajo gestión liderada por el fondo ‘Quadriga Igneo UCITS’, y que durante la crisis sanitaria se consolidó con retornos del +10% en febrero y 19,1% en marzo.
La cartera de inversión de Quadriga Stable Return se diferencia por su componente 'antiburbujas' con un peso objetivo del 25% del patrimonio, que protege y complementa activos de riesgo como la renta variable, cuyo peso objetivo es otro 25% del patrimonio del fondo y con estrategias no direccionales de valor absoluto que tienen un peso objetivo de por lo menos un 50% del patrimonio del fondo, y que en conjunto crean una cartera que busca un comportamiento estable independientemente de las condiciones de mercado.
Diego Parrilla, gestor y socio de Quadriga Asset Managers, señala que "las carteras de inversión son como equipos de futbol: necesitan delanteros que metan goles durante mercados alcistas, pero también porteros y defensas que protejan el capital durante mercados hostiles, así como centrocampistas que controlen y recuperen el balón. La clave, tanto en las inversiones como en el futbol, es crear equipos equilibrados en el que cada jugador cumpla con su función. Equipos con once delanteros, como es el caso de carteras que solo invierten el bolsa o crédito, tienden a sufrir enormes pérdidas durante mercados hostiles debido a un problema de falsa diversificación. Los equipos ganadores deben muchos de sus éxitos a sus porteros y defensas, no sólo a sus delanteros".
Quadriga Stable Return se posiciona como una solución ante los tipos de interés negativos. "Por primera vez en la historia el bono español a 10 años ha cotizado a rentabilidades negativas, una aberración que no refleja ni compensa el enorme riesgo de crédito incurrido por los inversores, muestra inequívoca de la extraordinaria distorsión en los mercados de renta fija y crédito que están creando las políticas monetarias sin límites".
Alfonso Torres, gestor y socio de Quadriga, destaca que "además de la evidente falta de rentabilidad y riesgo de crédito, los mercados de renta fija y bonos corporativos sufren un importante riesgo adicional: la inflación, un riesgo que muchos inversores ignoran por el momento pero que en nuestra opinión dará lugar a grandes pérdidas de poder adquisitivo en los próximos años. Dicho de otra forma, los 100 euros que te devolverá un bono a su vencimiento de 10 o 20 o 30 años, no te va a comprar mucho".
La estrategia con la apertura de la comercialización anunciada este lunes tiene como primer objetivo alcanzar un patrimonio gestionado de 250 millones de euros, y para ello Quadriga Asset Managers está en proceso de atraer capital estratégico a comisión cero. Para conseguir sus objetivos, Quadriga Stable Return sigue un proceso cuantitativo y cualitativo que combina la experiencia de gestores como Diego Parrilla o Alfonso Torres, y expertos en construcción de carteras como Luca Fedele y David Serero.
El propio Luca Fedele destaca que "Quadriga Stable Return es una solución conservadora que aplica tecnologías disruptivas de éxito, como las antiburbujas o gestión de riesgo por factores, con una mejora sustancial frente a los modelos tradicionales de diversificación por clases de activos, que sufren de falsa diversificación, o fondos multiactivos convencionales, cuyos retornos están más ligados a la dirección de los mercados, con grandes caídas y ganancias, en vez del perfil de protección de capital y retornos estables".
