La recompra de bonos da un respiro poco convincente a Credit Suisse

Credit Suisse, el segundo banco de proyección internacional más importante de Suiza, se enfrenta a una profunda crisis, fruto de las dudas que ha expresado el mercado en torno a la reestructuración que planea la entidad, en la que pretende incluir la venta de una parte de sus negocios y una larga historia de problemas de gobernanza. Esta fuerte presión ha ocasionado unas consecuencias devastadoras en el mercado bursátil, donde las acciones del banco han perdido más de la mitad de su valor desde inicios de año.

En busca de un remedio para frenar esta sangría, Credit Suisse lanzó este viernes una oferta de compra de bonos sénior denominados en euros, dólares y libras esterlinas por un total de 3.000 millones de francos suizos (3.094 millones de euros), con el propósito de realizar ahorros en los intereses que tiene que pagar a los poseedores de esos bonos en un momento en el que considera que el mercado le ofrece condiciones interesantes para la recompra de deuda.

La estrategia de recompra de deuda parece haber sido bien recibida por los inversores, ya que las acciones del banco se anotaron más de un 5% en la jornada del viernes, pero son insuficientes para recuperarse de la fuerte caída y recuperar la confianza del mercado, que a lo largo de la semana ha especulado sobre su posible caída y los efectos que podría tener sobre otras entidades financieras.

Quieren recuperar 1.000 millones en bonos

"Estas operaciones son coherentes con nuestro enfoque proactivo para gestionar nuestra composición general de pasivos y mejorar los gastos por intereses”, indicó Credit Suisse en un comunicado. Según los detalles comunicados por el banco, su plan es recuperar ocho tipos de bonos sénior en euros y libras esterlinas hasta por 1.000 millones de euros. Otros ocho bonos denominados en dólares serán comprados por un valor total de 2.000 millones de dólares.