El recorte en la 1|2|3 de Santander deja su base de accionistas en mínimos de 2017

  • El banco ha rebajado el saldo máximo remunerado al 3% desde los 15.000 euros hasta los 1.000 euros y se plantea más recortes. 
Evolución de los accionista de Banco Santander
Evolución de los accionista de Banco Santander

Banco Santander pasaba revista la semana pasada al segundo trimestre de este curso. Su presidenta, Ana Botín, lo hacía con optimismo al afirmar que "el banco ha obtenido su mejor beneficio ordinario trimestral de los últimos ocho años, lo que refleja el progreso de nuestra transformación comercial y digital". De hecho, su margen de intereses en España aumentaba un 4% durante el primer semestre y, en esta buena evolución, ha jugado un papel importante la Cuenta 1|2|3. 

La entidad ha rebajado el coste de sus depósitos desde el 0,41% de comienzos del pasado curso hasta el 0,14% actual debido a los continuos 'tijeretazos' que ha aplicado a Cuenta 1|2|3. No obstante, esta rebaja tiene una segunda derivada menos beneficiosa para la compañía: su número de accionistas acumula tres trimestres de descensos y se sitúa en su nivel más bajo desde que cerrara 2017, es decir, hace justo año y medio. 

El número de accionistas de Banco Santander se sitúa en los 4.054.208, casi 35.000 menos que hace tres meses. De hecho, la cifra podría situarse por debajo de los cuatro millones si siguen los descensos que ha sufrido desde que alcanzara los 4,19 millones de inversores en el tercer trimestre de 2018. De hecho, los inversores que obtenían acciones gracias a su Cuenta 1|2|3 han dejado de recibir títulos ya que desde el 31 de marzo del curso pasado ya no se reciben acciones por el uso de tarjetas, contratación de productos, transacciones... opción que se reserva solo para los nuevos usuarios que opten por contratar la cuenta. 

La mayor parte de sus acciones está en manos de inversores institucionales, que poseen cerca de seis de cada diez euros que capitaliza la entidad (59,41%), la segunda mayor en tamaño tras Inditex, mientras que los minoristas ostentan alrededor de cuatro de cada diez euros (39,46%), siendo el 1,13% restante acciones que tienen los miembros del consejo de administración. Por ejemplo, Javier Botín-Sanz de Sautuola y O'Shea, hijo del difunto Emilio Botín y consejero externo, posee un 0,494% del capital. 

Esta huida de accionistas se produce tras rebajar la entidad el saldo máximo remunerado al 3%, que pasaba en un primer 'tijeretazo' de 15.000 a 10.000 euros, posteriormente se recortaba a 6.000 euros y, finalmente, a solo 1.000 euros. Además, desde la propia entidad no descartan rebajarlo aún más y otras entidades, como es el caso de Sabadell, ya estudian cobrar a sus clientes particulares por los depósitos que tienen en el banco. 

La evolución en bolsa de la compañía tampoco ha ayudado a que sus accionistas mantuviesen las acciones ya que, al igual que el resto de compañeros del sector, se situaba en los vagones de cola en términos de rentabilidad y la marcha en el primer semestre tampoco ha sido muy esperanzadora. Solo durante 2018 sufría un desplome del 27%, penalizado por su alta exposición a Brasil. 

El banco cántabro solo avanza un 5% en bolsa durante este año, bastante por debajo de su índice de referencia, el Ibex, que sube un 8% o el EuroStoxx 50, que se dispara cerca de un 18%. Por tanto, le pasa factura (al igual que al sector) el entorno de tipos bajos y las pocas expectativas de que a corto o medio plazo se suba el precio del dinero. 

Los bancos de inversión, al igual que muchos gestores 'value', confían en un resurgir de las entidades en bolsa. El consenso de mercado recomienda 'comprar' acciones de Banco Santander y le asigna un precio objetivo de 5,08 euros por título. Es decir, contaría con un recorrido alcista para los próximos meses ligeramente por encima del 25%.  

Nuria Álvarez, analista de Renta 4, señalaba a raíz de los resultados de Santander que "deberíamos ver una continuidad en la tendencia vista con crecimiento de los ingresos recurrentes apoyado por mercados emergentes y mayores spreads en los desarrollados. Continuarán centrándose en la mejora de la eficiencia, con el control de costes con un objetivo de reducción en Europa de 1.000 millones de euros". 

Mostrar comentarios