Desplome sin paliativos de Siemens Gamesa en bolsa. La compañía de renovables ha llegado a hundirse cerca del 16% en los primeros minutos de negociación tras lanzar un 'profit warning' -una advertencia de que sus beneficios serán peores de lo previsto- para sus cuentas anuales. La firma capitaneada por Andreas Nauen remitió anoche a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sus nuevas perspectivas, teniendo ya en cuenta la información al cierre de su tercer trimestre fiscal, que va de abril a junio.
El tijeretazo viene provocado por las provisiones de 229 millones de euros que la compañía ha tenido que aprobar para cubrir "el acusado aumento de los precios de las materias primas y el aumento de las estimaciones de costes de lanzamiento de la plataforma 5.X de Siemens Gamesa, especialmente en Brasil", explicaba la compañía.
Después de un 2020 de récord para el sector de las renovables en bolsa, la compañía del Ibex 35 registraba un retroceso en lo que va de año del 20,6% hasta su cierre previo, en 26,28 euros, lo que se ha traducido en una pérdida de capitalización de 2.639 millones de euros. El efecto de la fuerte caída de Siemens Gamesa arrastra a otras compañías del sector, como Solaria, que se deja un 3,3% en el selectivo español.
Unos ingresos entre 10.200 y 10.500 millones de euros
Siemens Gamesa, que presentará sus resultados definitivos del segundo trimestre el próximo 30 de julio, ha revisado a la baja sus previsiones para 2021 hasta situar los ingresos en una horquilla entre 10.200-10.500 millones de euros. La firma de renovables ha tenido que provisionar 229 millones para proyectos onerosos por el incremento de los precios de las materias primas y de los costes de lanzamiento de su plataforma 5.X, sobre todo en Brasil.
Todo lo anterior le ha llevado a ajustar el margen Ebit para el ejercicio 2021 a un rango entre el - 1% y el 0 %. El grupo de energías renovables señala que el impacto de estos factores se ha visto exacerbado por la pandemia, especialmente en países como Brasil donde la compañía se enfrenta a "deficiencias" en la cadena de suministro y a "cuellos de botella" relacionados con la ejecución. En agosto del año pasado, la compañía avanzó que esperaba retornar a márgenes positivos en 2021 y facturar entre 10.200 y 11.200 millones de euros.
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