El mercado está dando una oportunidad al nuevo primer ministro, Rishi Sunak, que este martes estrenó gabinete y no quiso olvidarse de lanzar un mensaje a los inversores en deuda del Reino Unido: el nuevo Ejecutivo será conservador con el endeudamiento. Sin concretar por dónde irán las medidas de austeridad, los operadores de bonos le compraron la idea y llevaron a la referencia a 10 años por debajo de los niveles de finales de septiembre. La rentabilidad de estas emisiones cayó por debajo del del 3,7%, que es la zona más baja desde que Liz Truss presentara su fatídico plan fiscal el pasado 23 de septiembre.
La expansión fiscal y de gasto público anunciada por Truss, que primero le costó el puesto al ministro de Finanzas y que finalmente desembocó en la dimisión de la propia primera ministra, provocó un incremento de los intereses de la deuda tan fuerte que forzó al Banco de Inglaterra a intervenir en el mercado y a suspender algunas medidas de política monetaria, como la reducción de su cartera de deuda.
En paralelo a los bonos, la libra también sufrió con fuerza y la llegada de Sunak la ha rehabilitado, regresando a los niveles de finales de septiembre y del arranque octubre, tras el paquete de rescate del organismo que gobierna Andrew Bailey, que amplió sus medidas anticrisis para tratar de estabilizar el mercado de bonos, que estaba pasando factura a los fondos de pensiones; claves en el sistema de ahorro del Reino Unido.
Sunak, sin embargo, tendrá que presentar un plan convincente para controlar la volatilidad de la deuda y la divisa, que se desprende que será conservador en gasto, continuista con el programa económico de Boris Johnson, y que contemplará incrementos de los impuestos. El nuevo primer ministro ha optado por mantener en su puesto a Jeremy Hunt, que continuará como canciller y ministro de Finanzas y que tras tomar el relevo de Kwasi Kwarteng ya había cambiado totalmente el paso en materia impositiva. En principio, estaba previsto que Hunt presentara una nueva hoja de ruta el próximo 31 de octubre.
Un gabinete con rostros conocidos
El gabinete que conforma el nuevo Gobierno que lidera Sunak está formado por muchos rostros conocidos por el panorama británico. Entre ellos destaca no solo la apuesta por Jeremy Hunt, sino también la vuelta de Dominic Raab como viceprimer ministro y responsable de Justicia, tras su paso como 'premier' con Boris Johnson. Otro de los regresos más sonados ha sido el de Suella Braverman al ministerio de Interior, tras su dimisión del anterior Gobierno por incumplir los protocolos de seguridad.
También conservan sus puestos los ministros de Exteriores y Defensa, James Cleverly y Ben Wallace, ambos serán clave en las políticas británicas relativas a la guerra de Ucrania. En la misma línea están Michelle Donelan y Kemi Badenoch, que conservan su puesto al frente de Cultura, Medios y Deportes y Comercio Internacional respectivamente. Por otro lado, Grant Shapps cambia de tercio y deja Interior por Empresas, mientras que la que fuera viceprimera ministra con Truss, Thérèse Coffey, ahora se encargará del Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales.
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