El desarrollador estadounidense de videojuegos Take-Two Interactive, dueño de Rockstar Games o 2K, ha alcanzado un acuerdo para la compra de Zynga, responsable de juegos para redes sociales como FarmVille, tras una operación con la que busca aprovechar el auge de los videojuegos en dispositivos móviles. Tras anunciar el acuerdo, las acciones de Zynga se han disparado más de un 48% en preapertura.
En total, el valor del acuerdo es de cerca de 9.590 millones de euros, aunque, incluyendo la deuda, la operación se aproxima a los 11.250 millones (12.700 millones de dólares). Como parte de la transacción, Take-Two ha recibido financiación por 2.700 millones de dólares (casi 2.400 millones de eurosw) por parte de JP Morgan y tiene la intención de financiar el componente de efectivo de la transacción a través de una combinación de efectivo de su balance general, así como los ingresos de la nueva emisión de deuda.
Según el comunicado emitido por ambas partes, el desarrollador de títulos como Grand Theft Auto (GTA) o NBA 2K, abonará 9,86 dólares por cada acción de Zynga, incluyendo el pago de 3,50 dólares en efectivo y la entrega de 6,36 títulos de Take-Two, lo que representa una prima del 64% respecto del precio de cierre de las acciones de Zynga el pasado viernes.
Una vez finalizada la transacción, que está previsto para la primera mitad de año, se espera que los actuales accionistas de Take-Two posean entre el 67,2% y el 70,4% de la compañía y se estima que los accionistas actuales de Zynga controlarán entre el 29,6% y el 32,8% de la empresa combinada.
La adquisición de Zynga permitirá a Take-Two impulsar su crecimiento en el segmento de juegos para dispositivos móviles, cuyo mercado en 2021 se calcula en unos 136.000 millones de dólares (119.693 millones de euros), además de ampliar la base de gastos recurrentes de los consumidores de Take-Two, "una fuente de ingresos muy atractiva que ayuda a reducir la volatilidad" de ingresos, históricamente impulsada por la cadencia de lanzamientos de la empresa para consola y PC. Ahora, muchos consumidores que apostaron por los videojuegos durante la pandemia, se han pasado a los juegos móviles.
Asimismo, Take-Two espera lograr unos 100 millones de dólares (88 millones de euros) en sinergias de costes anuales en los primeros dos años después del cierre de la operación, principalmente mediante la racionalización de los gastos generales, incluidos los corporativos y administrativos, así como por las eficiencias de escala en toda la empresa.
Strauss Zelnick, presidente y consejero delegado de Take-Two, destacó que la operación "diversifica significativamente el negocio" de la empresa y establece una posición de liderazgo en dispositivos móviles, el segmento de más rápido crecimiento de la industria del entretenimiento interactivo. De su lado, Frank Gibeau, consejero delegado de Zynga, subrayó las posibilidades de crecimiento que ofrece la combinación de la experiencia de Zynga en plataformas móviles con las capacidades y propiedad intelectual de Take-Two.
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