La volatilidad de los últimos meses en el mercado reflejan el nerviosismo de los inversores ante el endurecimiento de la política monetaria para frenar la inflación. Este jueves, los principales índices de Wall Street cerraron con tono mixto en un intento de rebote tras las caídas acumuladas desde que la Reserva Federal de EEUU (Fed) anunció su mayor subida de tipos en este siglo la semana pasada, que se suman, a su vez, a la tendencia bajista en el año. Entre todos los índices, destaca en negativo el Nasdaq 100, que concentra las mayores compañías tecnológicas, uno de los sectores más golpeados ante la huida de los activos de riesgo.
En concreto, desde su máximo histórico que registró el 19 de noviembre del año pasado, la pérdida en capitalización se eleva a los 10 billones de dólares. Su valor actual ya es inferior a los 25 billones y el retroceso supera el 30%. Este miércoles, el Nasdaq 100 marcó un punto de inflexión después de perder la cota psicológica de los 12.000 puntos y caer a un nivel inédito desde noviembre de 2020. La caída se produjo "por el miedo de los inversores a una Fed más 'hawkish'", es decir a favor de una política monetaria más restrictiva, según explican los analistas de IG. Los inversores han marcado su rumbo según la hoja de ruta de la autoridad monetaria y, de hecho, la tendencia bajista se inició hace seis meses, justo cuando la institución que dirige Jerome Powell comenzó a modificar su discurso sobre la inflación y abrió la puerta al 'tapering'.
La respuesta de los inversores no ha sido muy distinta en otro valores pero las caídas son menores. El motivo es el destacado peso de las denominadas 'big tech' en este índice. Así, por ejemplo, el S&P 500, donde los sectores están más diversificados, se deja casi un 20% desde máximo histórico. Las compañías tecnológicas concentraron la inversión en un periodo de bajas o nulas rentabilidades de la deuda por los bajos tipos de interés. El escenario ahora ha cambiado provocando una huida de los activos de riesgo, con la amenaza de una corrección sobre el mercado. "Esta volatilidad intradía y los cambios de opinión son indicativos de que los inversores están nerviosos y, en sí mismos, son una señal bajista", explica Lewis Grant, gestor de Federated Hermes Limited.
La evolución del Nasdaq 100 está sobre todo condicionada por sus cuatro mayores valores por capitalización: Apple, Microsoft, Alphabet (Google) y Amazon. Las cuatro suman una valor total en el mercado cercano a los 7 billones de dólares, es decir, el 30% del total, mientras que solo 21 empresas tienen un peso superior al 1% en el selectivo. Pese a que las 'big tech' se han dejado estos meses cerca de 1,5 billones de dólares, su peso, incluso, se ha incrementado.
Apple es la compañía de mayor ponderación, por encima del 13%, y capitalización, casi 2,5 billones de dólares. Sin embargo, esta semana ha llegado a perder el trono de mayor capitalizada a nivel mundial tras ser superada por la petrolera Aramco, en un claro ejemplo del cambio de ciclo que se está produciendo en la renta variable. Las acciones de Apple cotizan actualmente por debajo de los 142 dólares, más de un 22% menos que en enero y lejos de los 180 dólares que rozó en diciembre cuando registró su máximo histórico. No obstante, el último año se revalorizó casi un 30%, llegando a superar los 3 billones de capitalización y actualmente cotiza en niveles de octubre de 2021.
Además, el fabricante de iPhone o iPad sufre un desplome en lo que llevamos de 2022 menor que otras de las grandes compañías del Nasdaq 100. Amazon, cuyo peso en el índice roza el 6%, se sitúa entre las más castigadas con un retroceso superior al 37% desde enero y superior al 40% desde su máximo Con estas caídas se arriesga a salir del club del billón de dólares de capitalización. Tras presentar resultados ya registró su peor jornada en bolsa desde 2006 después de que el gigante del comercio electrónico anunció su menor crecimiento en ingresos en más de dos décadas.
Los resultados trimestrales están siendo una prueba de fuego para las compañías ante el impacto del cierre de sus negocios en Rusia y de la guerra en Ucrania. Pese a que Microsoft logró superarla, acumula un desplome anual superior al 23%. Como consecuencia, la segunda mayor compañía del Nasdaq 100 por peso, ya ha perdido los dos billones de dólares de capitalización. En el caso de Alphabet (Google) la caída desde enero también supera el 20% y cae de los 1,5 billones de capitalización.
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