La mayoría de empresas del Ibex 35 ha sufrido las consecuencias de la Covid-19 en su cotización puesto que el principal selectivo cae cerca de un 22% y entre los 'blue chips' solo Iberdrola aguanta en positivo durante este 2020. Uno de ellos, Telefónica, ha sufrido un castigo del 26% pero algunos de sus accionistas confían en que la situación se de la vuelta y la 'teleco' presidida por José María Álvarez-Pallete haya tocado suelo como es el caso de Criteria y se asista a un tramo alcista.
Isidro Fainé, a través de Criteria Caixa, el holding de inversiones de Fundación La Caixa, ha realizado distintas operaciones de compra en los últimos meses esperando este ansiado tramo alcista. Estos movimientos, notificados a la CNMV por su condición de vicepresidente, se han saldado con la compra de un total de 1,66 millones de títulos de Telefónica, por los que ha desembolsado cerca de 7 millones de euros. El precio medio pagado es de 4,18 euros por título, por lo que les saca una rentabilidad superior al 5% desde que iniciara las compras a finales del mes de marzo y que se han inensificado tras cerrar la compañía del Ibex el acuerdo para la fusión de O2 y Virgin Media, filiales en Reino Unido de la española y de Liberty Global.
La participación directa de Criteria en la 'teleco' se sitúa por encima del 1,25% del capital y está valorada, a precios de mercado, en cerca de 290 millones de euros. Por tanto, la compañía gana más peso en la operadora puesto que también ostenta un 40% de las acciones de Caixabank, entidad que tiene una participación del 5,01% en la empresa de telecomunicaciones y es su mayor accionista tras BBVA.
Este respaldo de Fainé recuerda a otros que ha realizado el vicepresidente de Telefónica para tratar de sostener la acción en un escenario de caídas. El pasado verano Criteria optaba por comprar cerca de 1,5 millones de acciones (menos que en esta ocasión) pero al contar con un precio más alto el desembolso fue de 9,7 millones de euros. Esta participación del holding de la Fundación La Caixa se ha ido construyendo desde 2018 y se ha realizado en un momento en el que la acción ha sufrido un continuo desplome (llegó a marcar mínimos de 1997 en marzo) y que ha provocado un significativo deterioro en el valor de su participación. De hecho, la capitalización de la operadora está por debajo de los 23.000 millones de euros y es la quinta más grande del Ibex, aventajando en pocos millones a Amadeus.
La mayoría de las operaciones de Criteria en los últimos meses se han producido antes de la 'fecha de corte' para recibir los 0,2 euros por acción que distribuirá Telefónica como dividendo complementario. Este pago ofrece una rentabilidad del 4,5% si se optara por cobrarlo en efectivo y no en acciones puesto que dicho reparto se hace bajo la modalidad de scrip dividend. La fecha límite era el pasado 15 de junio y al tratarse de uno de los pagos más atractivos siempre impulsa su cotización los días previos. De hecho, la compañía ha dado cierto síntoma de fortaleza al mantener su retribución en un escenario en el que la mayoría de cotizadas ha optado por aplazar los pago o, directamente, suspenderlos.
El propio José María Álvarez Pallete ha sido otro de los directivos de la 'teleco' que ha comprado acciones tras el impacto de la Covid-19. Lo hizo el pasado 11 de mayo con la adquisición de 100.000 títulos, por los que ha desembolsado 419.000 euros. De hecho, el precio unitario de 4,19 euros por título está por debajo del nivel al que cerró este viernes, que es de 4,42 euros por acción.
La 'teleco' comienza a aparecer entre las recomendaciones de algunos bancos de inversión. Por ejemplo, Banco Santander sitúa a Telefónica como una de las empresas más 'baratas' por fundamentales debido a la corrección que ha sufrido y resalta su operación en Reino Unido. "La integración de Virgin Media y O2 transformará el mercado de telecomunicaciones británico, mejorará la posición competitiva de ambos y podría generar 0,63 euros por acción", según esgrimen los analistas de la entidad presidida por Ana Botín, que también destacan las tendencias orgánicas estables en Alemania y Brasil.
El presidente de Telefónica, en la junta de accionistas celebrada hace pocos días, destacó que la operadora "no es inmune a la convulsión de los mercados" tras sufrir un castigo del 26% durante este año. "Nuestro negocio es más resistente que otros; estamos seguros de que con la ejecución de nuestro plan de acción estamos avanzando en la dirección correcta, generando valor y de que esto se reflejará en la cotización", afirmó.
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