Los resultados anuales de Telefónica no han convencido a los inversores. La 'teleco' española se situaba el jueves como la más bajista del Ibex 35 al caer un 3,82% y este viernes se repite la misma tónica tras retroceder un 2,86%, hasta los 6,11 euros por título, lo que hace que liderara las caídas en el principal selectivo español. Además, con este descenso se dispara el castigo hasta el 6,5% en solo dos sesiones de bolsa.
Telefónica cerraba el año 2019 con un recorte de beneficios del 65% debido a varios extraordinarios, entre los que se encontraba la provisión para el plan de bajas incentivadas, la reversión de activos por impuestos diferidos en México y el deterioro del valor de la filial argentina. Con este escenario, la 'teleco' ganaba 1.142 millones de euros, mientras que si se excluyeran estos casos, el resultado hubiera sido ligeramente inferior al del curso anterior.
Los analistas de Bankinter no veían de manera positiva las cuentas de la 'teleco'. "Los resultados son débiles y penalizados un trimestre más por extraordinarios y por debajo de lo estimado. Pese a ello, el mix de ingresos mejora y el endeudamiento cae". En cuanto a la 'hoja de ruta' para este curso destacan que los objetivos "nos parecen prudentes".
La 'teleco' anunciaba unas previsiones de ingresos y beneficio operativo (ebitda) estables frente a 2019. Además, prevé que el 'free cash flow' (flujo de fondos que genera la empresa) se mantenga en torno al 19,9% en el que situaba en 2019. "El consenso está alineado con esta guía en las tres magnitudes. Además, anuncian una guía a 2022 que asume crecimiento de ingresos y mejorar el flujo de caja en más dos puntos porcentuales", según señalaba Iván San Félix, analista de Renta 4.
El presidente de Telefónica, José María Álvarez Pallete, insistía tras presentar resultados en que entre las acciones que debilitarían a la compañía estaría la venta de infraestructuras críticas, "que se pagarían de manera generosa" pero que descapitalizarían la compañía. O la recompra de acciones, que ha sido rechazada. "Nuestra obligación es trabajar en los próximos cinco o diez años y no en el próximo trimestre".
Javier Molina, portavoz de eToro en España, señalaba la "ida y vuelta en la operadora en plena zona de control. Pese a que el sector 'teleco' europeo está en clara tendencia alcista, Telefónica sigue ajena a esta situación. Tras la publicación de resultados, hemos asistido a un aumento de volatilidad que ha hecho que la zona de los 6,50 euros sea la referencia de corto plazo a superar para pensar en nuevas alzas. Sin embargo, hasta que no se superen los 7,20-7,50 euros, el proceso actual es de mero rebote. Lo interesante es la cercanía a los 6,00 euros, gran soporte de largo plazo. Sin embargo, si se pierde esa zona, el riesgo es ver precios por debajo de los 5,70 euros e incluso 5,30".
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