Frente a la crisis de la Covid

El yuan exhibe su fuerza frente al dólar y saca brillo a la recuperación de China

El renminbi situó su cruce frente al billete verde por debajo de las 6,7 unidades por dólar (en 6,6933) este viernes, por lo que se aprecia más de un 6% desde los mínimos que marcó en mayo en 7,1363 unidades

El yuan marca máximos de cuatro años y saca brillo a la recuperación de China
El yuan marca máximos de cuatro años y saca brillo a la recuperación de China
Pixabay

Peldaño a peldaño, paso a paso... China ha iniciado la remontada de la crisis del coronavirus y va camino de ser, como previó el Fondo Monetario Internacional, la única de las grandes economías capaz de crecer este año. La fortaleza de los datos del sector servicios en septiembre, que representa el 60% de la economía del gigante asiático y la mitad de los empleos urbanos, van en esa dirección. También el avance del sector industrial. Ahora es el yuan el que gana terreno al dólar para situarse en su nivel más alto desde febrero de 2019, hace ya veinte meses, dotando de un brillo extra a la salida de la mayor crisis económica en tiempos de paz. 

El renminbi ha llegado a situar su cruce frente al billete verde por debajo de las 6,7 unidades por dólar (en 6,6933) este viernes, por lo que se aprecia más de un 6% desde los mínimos que marcó en mayo en 7,1363 unidades por dólar. Las razones económicas se entremezclan con las políticas a la hora de explicar esta fortaleza, puesto que una parte notable de la reciente depreciación del dólar obedece a que las encuestas prelectorales en Estados Unidos dan como más probable la victoria del demócrata Joe Biden en las próximas elecciones, lo que desatascaría la aprobación del paquete de estímulo de 2,2 billones de dólares propuesto por su partido. 

El PIB de la segunda economía del mundo se contrajo un 6,8% en el primer trimestre, en el peor momento de la pandemia para el país, por debajo del 32,9% en términos anualizados que se hundió la economía estadounidense en el segundo trimestre -cuando lo peor de la primera ola llegó a esas latitudes- o del 17,8% que se desplomó la española también entre abril y junio, en pleno confinamiento. En ese periodo China, que aplicó estrictas medidas de control de la enfermedad, ya ha registrado un avance de su actividad del 3,2%, según su Oficina Nacional de Estadística, es decir, por encima del 2,5% que habían pronosticado los expertos y pese al severo daño que la crisis estaba infringiendo en ese momento a sus principales mercados de exportación. 

El Fondo Monetario Internacional (FMI) calcula un avance de su riqueza del 1,2% este año, que a la luz de los últimos datos también podría quedarse corto. Sería la única de las grandes economías capaz de esquivar la recesión este ejercicio en medio de los nubarrones de incertidumbre que nublan las perspectivas para el resto. El probable estancamiento de la recuperación económica mundial y la consiguiente disminución del apetito de riesgo del mercado, unidos al tramo final en la carrera electoral en EEUU tendrán su reflejo en la moneda china.

"Una vez superadas las elecciones (en Estados Unidos), creemos que el yuan seguirá beneficiándose de que la economía de China lidere la recuperación mundial, con un crecimiento interno que ahora es más resistente a las condiciones externas que en anteriores recuperaciones económicas", apuntan desde el bróker Monex Europe. Sin embargo, prevén que alrededor del nivel de 6,7 unidades por dólar la tolerancia del Banco Central de China hacia la fuerza sostenida de su moneda será "limitada", lo que llevará a una disminución de la velocidad de ese rally.

Los últimos datos publicados esta semana no pueden ser mejor para la segunda economía del mundo en las actuales circunstancias. La recuperación de la actividad del sector servicios de China avanzó por quinto mes consecutivo en septiembre, mientras que la contratación aumentó por segundo mes consecutivo. El índice de gestores de compras (PMI, por sus siglas en inglés) del sector servicios de Caixin/Markit, que engloba a las empresas de ámbito privado, subió a 54,8 puntos desde los 54,0 de agosto, la lectura más alta desde junio y muy por encima de la marca de 50 que separan el crecimiento de la contracción.

Las empresas contrataron más por segundo mes consecutivo, aunque todavía a un ritmo modesto, lo que indica cierta recuperación de un mercado laboral que se ha visto golpeado por las fuertes caídas en la demanda y por las restricciones sanitarias de principios de año. "La recuperación del sector de los servicios después de la epidemia mostró signos de estar acelerándose", explica Wang Zhe, economista principal de Caixin Insight Group, en un comentario adjunto a la encuesta.

El despertar del consumo

Y si las encuestas no fueran suficientes están las imágenes. Las de los últimos días han sido de millones de turistas chinos viajando por su país durante su fiesta nacional de la Semana Dorada. Estos ocho días y, según datos del Ministerio de Cultura y Turismo del país, se han producido 637 millones de viajes que han dado lugar a unos ingresos de unos 466.600 millones de yuanes (58.744,72 millones de euros). Esta fiesta es esencial porque se toma como referencia de la salud del gasto en la segunda economía mundial. 

Las cifras, que muestran una actividad dinámica en relación con la situación que atraviesan otros países, se mantienen por debajo de los 782 millones de viajes que tuvieron lugar en la misma celebración el año pasado y con un día menos (fueron siete jornadas festivas y no ocho). Así, los ingresos por turismo también fueron un 30% inferiores a los del mismo período del año anterior, pero la caída ya ha sido mucho menor que la que se registró el pasado mes de junio en el festival del 'Barco del Dragón'

El gasto total de consumo de China sólo empezó a mostrar signos positivos en agosto, por primera vez este año, con un aumento de las ventas al por menor del 0,5% anual. Anteriormente, se había mantenido lento a pesar de que el Gobierno había mantenido el virus Covid-19 bajo control, con los consumidores más cautelosos debido al alto nivel de desempleo y a la incertidumbre mundial. "Las políticas fiscales aplicadas para ayudar a impulsar el gasto de los consumidores parecen estar dando ahora sus frutos, aunque el ritmo de la recuperación es lento. Podríamos ver al gobierno introducir algunas políticas y/o incentivos para estimular aún más el consumo interno, pero a menor escala", apunta Magdalene Teo, analista de Renta Fija Asia, del banco privado suizo Julius Baer. El gigante asiático despierta en un mundo adormecido y castigado por la Covid-19. 

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