El ataque tuvo lugar la noche del sábado contra la comunidad afrodescendiente de Carrá, perteneciente a San Juan. Las informaciones iniciales apuntan a que las víctimas fueron víctimas de un cruce de disparos entre integrantes del ELN y de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), según HRW.
No obstante, un responsable de Derechos Humanos informó a la ONG posteriormente que, según los testimonios de los residentes, no existió este enfrentamiento y que fueron varios hombres que, con el emblema del ELN, aparecieron en la localidad y abrieron fuego indiscriminadamente, versión que defiende la Alcaldía.
Posteriormente, la Fiscalía de Colombia atribuyó a la guerrilla el ataque, si bien ésta respondió a través de su cuenta oficial de Twitter desvinculándose del mismo y señalando que "la información falsa no aporta a la paz".
En este contexto, el director de HRW para las Américas, José Miguel Vivanco, ha asegurado que "las autoridades colombianas deberían llevar a cabo una investigación rápida y exhaustiva y garantizar que los responsables de los asesinatos de Carrá son procesados y rinden cuentas por sus acciones".
"El Gobierno debe tomar medidas inmediatas para satisfacer las necesidades de las familias desplazadas y proveerlas de la asistencia que necesiten", ha agregado.
El 7 de febrero, el Gobierno y el ELN iniciaron las conversaciones de paz, después de un año de parálisis por la negativa del grupo armado a liberar a todos los secuestrados. Desde entonces, las partes negocian en la capital ecuatoriana mientras la guerra sigue en Colombia.
Las AGC, que no forman parte de las conversaciones de paz, emergieron tras una débil desmovilización paramilitar hace más de una década. Los dos grupos combaten, al menos en una parte de la región, por el control sobre el río San Juan. HRW ya visitó las comunidades ubicadas en la zona, entre ellas Carrá, a principios de marzo como parte de una investigación sobre presuntos abusos cometidos por ambos grupos.
Durante la visita de HRW, los residentes de Carrá aseguraron que la Marina colombiana se había visto envuelta en un tiroteo con los 'gaitanistas' cerca de una escuela durante cerca de una hora que, si bien concluyó sin víctimas, hizo a los residentes temer por posibles nuevas peleas o abusos.
En este contexto, Vivanco ha insistido en que si las autoridades no protegen a las víctimas "la promesa de paz en Colombia seguirá siendo una promesa vacía para las comunidades ribereñas en el departamento de Chocó".
El ELN ha reclamado al Ejecutivo un alto el fuego bilateral pero el presidente, Juan Manuel Santos, se ha negado, como ya hiciera con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). "Ordené la persecución inmediata de los responsables", ha escrito Santos en Twitter.
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