En su comunicado, recogido por la agencia rusa de noticias Sputnik, Kadirov ha detallado que los agentes intentaron detener a varios sospechosos, que se negaron a identificarse y abrieron fuego contra los policías.
"En respuesta a la propuesta de identificarse, abrieron fuego y lanzaron una granada", ha dicho, afirmando que otros dos civiles han resultado heridos.
"Las acciones tomadas inmediatamente permitieron matar a tres milicianos", ha agregado, recalcando que la célula estaba controlada desde Siria por un reclutador del grupo yihadista Estado Islámico.
Horas antes, las fuerzas de seguridad rusas mataron a otros tres presuntos milicianos en un tiroteo en la localidad de Jasaviurt, ubicada en la república norcaucásica de Daguestán.
Según las informaciones facilitadas por la agencia rusa de noticias TASS, la ciudad fue escenario de una operación de las fuerzas antiterroristas que se saldó sin bajas entre los agentes y la población civil.
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