A esta modelo con Síndrome de Down nada le impide ser tan guapa como sexy

En ocasiones los sueños se pueden llegar a cumplir. Con ganas y sacrificio, la historia nos ha enseñado que se pueden alcanzar metas aparentemente utópicas. Es el caso de Madeline Stuart, una chica australiana de 18 años con Síndrome de Down que se ha convertido en modelo para intentar cambiar el mundo.

Madeline siempre lo deseó con fuerza y sus premisas se cumplieron a base de fuerza de voluntad. Pelirroja y con ojos azules, la australiana se propuso como principal objetivo perder peso y lo consiguió. De nada importaba su enfermedad coronaria. En apenas un año logró bajar de 66 kilos a 45. Esos prejuicios de la gente hacia ella durante su etapa de adolescente desaparecieron. Todo ello a base de ejercicio y una dieta sana. Porque, a parte de su vida como modelo, es una deportista ejemplar según afirman sus más allegados.

Hace natación cinco días a la semana, baila hip-hop y ha representado a Australia en dos grandes eventos a nivel mundial. Primeroparticipó en los Juegos Paralímpicos como jugadora de cricket y ha ido a los mundiales de danza celebrados en Los Ángeles.

'Maddy' como le llama la familia, tiene todo el apoyo de su círculo cercano y sobre todo de su madre Rosanne, con la que mantiene un vínculo especial y que está decidida a ayudarla en su inclusión al mundo de moda para dar una impresión positiva al mundo.

A día de hoy, está buscando un representante que le lleve a un estrellato que no tardará en llegar. En apenas unos días, su perfil de Facebook, donde sube todas sus fotos, tiene más de 50.000 seguidores. Y subiendo. Todo sea por mostrarle al mundo que puede ser tan sexy como cualquier mujer. No hay nada imposible y Madeline ha demostrado que los sueños se cumplen con sacrificio.Isabel García, una diseñadora de altura

Isabel García Salguero, conocida como 'Lady Isabel', es una diseñadora española con Síndrome de Down que se está ganando la admiración de buena parte del país por la forma de plasmar sus ideas sobre los vestidos. Ella es la cabeza pensante. Da la idea a los diseñadores para que estos hagan unos vestidos que han visto la luz en dos pasarelas. 'Ella me decía que quería que sus amigos desfilaran con sus vestidos y yo no le hacía mucho caso porque le gustaban muchas cosas. Pero insistió, insistió e insistió y después nos dimos cuenta que sus vestidos eran muy bonitos llenos de colores, todos deferentes y muy imaginativos', habla a través del teléfono Aurora Salguero, una madre orgullosa que ha visto como su hija ha cumplido un sueño.

'Hemos conseguido el apoyo de diseñadores que han plasmado su idea porque ella no cose ni sabe de patronaje. Ella tiene la idea y con los modistos la interpretan y la discute con ellos. Participa en el proceso de creación pero no hace los vestidos ella. Les inspira. Elige telas y colores y el diseño', aclara.

Isabel cumplirá el próximo mes 29 años y fue hace dos cuando vio por primera vez sus ideas reflejadas sobre tela en León. 'Hemos tenido dos colecciones con cuatro desfiles (dos por cada una). La primera fue más de prueba porque era la primera vez que hacían vestidos con sus diseños y salieron cinco. En la segunda era un desfile sobre 17 diseños suyos y sacaron 25.Las dos colecciones las ha presentado en León 200ela primera y en junio de 2014 la segunda. Y después los ha llevado a Asturias. En diciembre de 2013 la primera y algunos modelos de la segunda en enero de 2015', dice.

Ahora, madre e hija ya preparan el tercer desfile que esperan que sea en Madrid. 'Habrán vestidos de fiesta, verano y moda con poesía, que lleva incorporado frases de una poeta que se inspira en Isabel para hacer poesía. ¿Qué si le haría ilusión vestir a Madeline? Pues claro el único inconveniente es que está en Australia. Hace unas semanas presentaron un cuento en Oviedo que se inspira en ella y otras chicas con Síndrome de Down desfilaron con sus vestidos', espeta.

El siguiente objetivo de Isabel es poner en marcha una línea de ropa para que su estilo embriagador llegue a todo el mundo. 'Nuestra idea es acabar emprendiendo y buscar financiación porque para tener producción propia es necesaria mucha inversión', habla Aurora con un orgullo propio de una madre que ha visto como se ha hecho realidad el sueño de su hija. 'Estoy muy feliz al ver que ha cumplido su sueño, esto le da mucha seguridad', finaliza.