Alemania se esfuerza en desmentir su falta de apoyo al resto de la UE

  • Alemania necesita a Europa para seguir adelante y no pretende ir en solitario. Eso se ha esforzado en demostrar el ministro adjunto de Alemania para Europa, Werner Hoyer, para justificar las dificultades que pone su país a la creación de eurobonos o a la buena marcha de su economía frente a la crisis en la que sigue inmersa el resto de la Unión Europea.

Werner Hoyer, ministro adjunto de Alemania para Europa
Werner Hoyer, ministro adjunto de Alemania para Europa
Raimond Spekking

Werner Hoyer, subdelegado de Angela Merkel para los asuntos europeos, ha venido a España para subrayar su "compromiso con una Europa fuerte en un mundo globalizado". Tras las críticas de otros estados miembros de la UE afirmando que Alemania sigue su propio camino en la recuperación económica, el ministro adjunto para Europa de ese país afirma que todo se debe a "percepciones erróneas" por haber comunicado mal las intenciones del Gobierno germano durante los últimos meses.

Hoyer ha dicho durante una visita a Madrid que Alemania "debe mucho a Europa", especialmente después de las dos guerras mundiales, y que "la actitud de Alemania está caracterizada por unas preocupaciones sinceras por Europa".

Afirma que su país no apoya la creación de eurobonos, del mismo modo que puso condiciones al rescate de Grecia retrasando la operación, porque cada estado miembro de la UE debe rescatarse a sí mismo primero para poder explotar un mercado europeo que mueve a 500 millones de personas.

"Cada uno es responsable de su propia deuda, porque así afrontarán sus principales problemas los países afectados", opina el político del partido liberal demócrata alemán FDP. "No sería justo que España -donde se está planteando retrasar la edad de jubilación hasta los 67 años-, tuviera que rescatar a un país donde se jubilan a los 58. Por eso no creo en los eurobonos".

Su solución pasa en primer lugar por más tecnología y educación, también subraya la necesidad de que "el sector privado [también] pague la factura" de la crisis y que los países más afectados por la crisis económica tomen medidas para amortiguarla, como ha hecho España.

"El problema principal es el equilibrio del pago del déficit común de la UE, así que es ilógico pedirle a Alemania que lo reduzca. Lo que hay que hacer es incrementar la demanda", defiende. "Hemos ayudado y seguiremos haciéndolo, por supuesto. Pero la solidaridad también significa realizar algunos cambios", insiste.

Para este miembro del Ejecutivo de Merkel, la crisis económica en la Unión Europea se debe principalmente a la política inflacionista con la que –cree- han estado jugando los países miembros. "Jugar con el déficit público y privado funciona solo si eres la moneda número uno del mundo y si puedes pagarlo tú mismo [como EEUU]. Esto no funciona en Europa", argumenta este economista.

"Tenemos que encontrar otra fórmula sin cuestionar la idea de una sociedad financiera. Siempre es más fácil culpar a los mercados, pero la verdad es que somos nosotros mismos [los países miembros de la UE] los que hemos negado la deuda pública, dejando el problema siempre para la próxima generación".

Mostrar comentarios