El fiscal general de Israel, Avijai Mandelblit, acusó al primer ministro en funciones, Benjamín Netanyahu, de fraude, cohecho y abuso de confianza en tres casos de corrupción, según informó en un comunicado el Ministerio de Justicia.
La acusación llega en pleno bloqueo político en Israel y sin nuevo gobierno desde las elecciones de septiembre, lo que aleja a Netanyahu de seguir en el poder tanto en una eventual repetición electoral como ante el proceso abierto en el Parlamento para formar Ejecutivo.
El Ministerio de Justicia señaló que Mandelblit adoptó la recomendación del Fiscal del Estado Shai Nitzan y la recomendación del Fiscal del Distrito de Tel Aviv, quien decidió tras la audiencia para presentar la acusación sobre los delitos mencionados. Los abogados defensores de Netanyahu recibieron la copia de la acusación.
La decisión sobre el primer ministro se tomó después de un examen exhaustivo de las numerosas denuncias planteadas durante los cuatro días de audiencia a principios de octubre de 2019. Todas las denuncias se examinaron en profundidad en un proceso de trabajo desplegado durante muchas horas, en el cual la Oficina del Fiscal del Estado presentó cientos de páginas de las supuestas pruebas de los delitos.
Los hechos se remontan a un período entre diciembre de 2012 y enero de 2017, cuando Netanyahu como Primer Ministro tenía la autoridad de otorgar permisos y licencias para diversas operaciones comerciales llevadas a cabo por el Grupo Bezeq. Después, también bajo su cargo de Ministro de Comunicaciones, también tuvo influencia sobre asuntos gubernamentales relacionados con dicha compañía.
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