Aumentan los muertos

China hace propaganda de la lucha contra el coronavirus para frenar las críticas

El Coronavirus se extiende por todo el mundo y lastra la economía.
El Coronavirus se extiende por todo el mundo y lastra la economía.
EP

Cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la alerta internacional por el brote de coronavirus 2019-nCoV aprovechó para alabar la respuesta de China a la epidemia.

En su nota, la OMS agradecía el "compromiso con la transparencia" del gobierno de Pekín, y el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, llegó a tuitear que "China en realidad está estableciendo un nuevo estándar para la respuesta al brote". Mucho énfasis para una cuestión que se encuentra bastante discutida.

A día de hoy se desconoce cuándo se inicio la epidemia del llamado virus de Wuhan, y los expertos ni siquiera tienen claro que su origen sea el mercado de marisco al aire libre de Huanan, como quedó claro en una reciente publicación recogida por The Lancet.

El Gobierno de Xi Jinping está empeñado en dar a entender a la población mundial que se está haciendo todo lo posible para tener bajo control la enfermedad, e incluso el Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) anunció que sus investigadores habían logrado aislar el virus y estaban preparados para tener una vacuna en 40 días. 

Medidas como la cuarentena para varias de las ciudades cercanas a la 'zona cero del brote' bien parecen más una estrategia para tener bajo control las críticas internas que una decisión tomada por consejo de los expertos. Al gigante asiático no le interesa que se prorrogue mucho más la crisis de salud, visto el daño que está realizando a su poderosa economía.  Por eso se ha lanzado a pedir calma al resto de países vecinos, y sobre todo a las grandes potencias, a pesar de los 425 muertos en China continental y los 20.428 contagiados hasta la fecha.

Contener el coronavirus en su epicentro, la ciudad de Wuhan, e impedir su propagación al exterior sigue siendo la máxima prioridad de las autoridades, según se han cansado de repetir a través de sus medios oficiales y de las embajadas en todo el globo. Según la legación en España, la tasa de mortalidad del coronavirus en China es del 2,1% y la provincia de Hubei aglutina el 97% de los fallecidos, "lo que significa que la tasa de mortalidad fuera de Hubei es del 0,16%".

No existen voces críticas dentro de China a las medidas aplicadas para contener la epidemia, y las escasas que hay tienden a ser silenciadas con facilidad. Es el caso de un médico, Li Wenliang, que se ha hecho famoso en medios de comunicación occidentales después de que revelase a través de un chat a sus colegas sus sospechas de que había aparecido un nuevo coronavirus, similar al SARS. En dicho mensaje, que terminó saliendo a la luz días después de que se hiciera pública la alerta, Wenliang les advertía del brote y les recomendaba usar ropa protectora para evitar contagiarse.

Pocos días después el médico recibió una visita poco amistosa de funcionarios públicos que le acusaron de "difundir información falsa", una circunstancia que puede acarrear importantes problemas con la ley en el país. Al final de enero, Li publicó una copia de su mensaje en Weibo, explicando lo sucedido, y logró de este modo que las autoridades se disculparan con él. Ahora lucha contra la enfermedad cuya aparición detectó de los primeros.

Mientras tanto, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hua Chunying, reclamó "racionalidad" y "objetividad" a la comunidad internacional, recalcando que el país está "progresando" en la lucha contra el coronavirus gracias a las medidas tomadas. 

Mostrar comentarios