Cruce de acusaciones

Trump responde a las acusaciones del líder iraní y advierte que "tenga cuidado"

  • "Su economía está colapsando y su pueblo está sufriendo. ¡Debería tener mucho cuidado con sus palabras!", escribió en su Twitter.
Donald Trump
Donald Trump
LA CASA BLANCA

La tensión entre Teherán y Washington continúa en medio del intercambio de acusaciones entre los líderes iraníes y el presidente de EEUU, Donald Trump. El mandatario estadounidense ha respondido a las palabras del líder supremo iraní, Alí Jameneí, que instó a los iraníes a mantenerse unidos frente a EEUU y llegó a tildar al presidente como "payaso". 

A través de su twitter, este viernes ha advertido a Jamenei que "tenga mucho cuidado con sus palabras". "El llamado 'líder supremo' de Irán, que no ha sido muy supremo últimamente, tiene algunas cosas sucias que decir sobre Estados Unidos y Europa", ha añadido en el mensaje. "Su economía está colapsando y su pueblo está sufriendo. ¡Debería tener mucho cuidado con sus palabras!", ha apuntado.

Las tensiones entre Estados Unidos e Irán han aumentado drásticamente a raíz de la muerte del general Qasem Soleimani, jefe de la Fuerza Quds de la Guerdia Revolucionaria iraní, en un bombardeo ejecutado por Washington el 3 de enero en la capital de Irak, Bagdad.

Soleimani murió junto al 'número dos' de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP) -una coalición de milicias iraquíes progubernamentales apoyadas por Irán-, Abú Mahdi al Muhandis, y varios milicianos iraquíes y militares iraníes.

En respuesta, Irán atacó con misiles dos bases militares situadas en Irak en las que se encuentran desplegados soldados estadounidenses, en lo que el líder supremo iraní, Alí Jamenei, describió como "una bofetada" a Washington. Trump aseguró horas después que los ataques se han saldado sin bajas, si bien la coalición internacional afirmó el jueves que el bombardeo iraní contra la base de Al Asad causó heridas a once militares estadounidenses.

El pacto nuclear está en entredicho desde que EE.UU. lo abandonara en mayo de 2018 y volviera a imponer a Irán sanciones, que el resto de firmantes (Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania) no han logrado contrarrestar. En respuesta, Teherán ha reducido gradualmente sus compromisos hasta que el pasado 5 de enero anunció que dejaba de cumplir en la práctica con las limitaciones impuestas a su programa atómico, incluidos los niveles de enriquecimiento de uranio.

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