
El ministro surcoreano de Defensa, Kim Tae-young, ha presentado este jueves su dimisión, dos días después del ataque de Corea del Norte sobre una isla surcoreana que causó cuatro muertos, dos de ellos civiles.
Según la agencia local Yonhap, el presidente surcoreano, Lee Myung-bak, ha aceptado su renuncia, que había sido reclamada por sectores de la oposición que pidieron una respuesta más contundente del Gobierno ante las "provocaciones" del régimen comunista norcoreano.
El presidente de Corea del Sur ordenó, tras celebrar una reunión de emergencia con sus ministros responsables de seguridad, fortalecer la defensa en la tensa frontera marítima con Corea del Norte, es decir en las cinco islas del Mar Amarillo, en respuesta al ataque del martes contra territorio surcoreano, informó la Casa Presidencial.
Lee indicó que es preciso estar preparados para "otra provocación" de Corea del Norte, algo que "puede ocurrir en cualquier momento", informó la agencia local Yonhap.
El Gobierno acordó "incrementar la fuerza militar, incluidas tropas de tierra, en las cinco islas del Mar Amarillo y dedicar más partidas presupuestarias a hacer frente a las amenazas de Corea del Norte", de acuerdo con un portavoz de la Casa Presidencial.
En esas islas, a apenas unos kilómetros de la costa norcoreana, las fuerzas militares serán equipadas con las mejores armas de las que dispone el Ejército surcoreano.
Una de esas islas, Yeonpyeong, fue la atacada este martes con 170 disparos de artillería del régimen comunista de Corea del Norte, que causaron cuatro muertos, dos de ellos civiles, y destruyeron una veintena de casas.
Estado preventivo
Seúl decidió modificar su actual política con respecto a posibles ataques del régimen norcoreano (las llamadas reglas de enfrentamiento) desde su actual estado "preventivo" por el de "responder a una posible provocación", según ese portavoz.
El portavoz oficial surcoreano indicó que Seúl va a seguir presionando a China para que se implique en la resolución de la crisis por su papel de gran aliado del régimen norcoreano, como también han reclamado Estados Unidos y Japón.
Según la agencia Yonhap, el ministro de Exteriores chino, Yang Jiechi, que tenía previsto visitar mañana Seúl para reunirse con su colega surcoreano, Kim Sung-hwan, ha pospuesto su viaje, alegando problemas de agenda.
Pekín ha mostrado su "preocupación" por la tensión entre las dos Coreas y ha llamado a la "calma", pero no ha condenado expresamente el ataque norcoreano, efectuado por sorpresa cuando en el Mar Amarillo militares de Corea del Sur realizaban ejercicios militares.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios