Una réplica de una pistola ha puesto en duda la seguridad que rodea al presidente de República Checa, Vaclav Klaus. El pasado viernes, mientras Klaus se daba un baño de multitudes en la ciudad norteña de Chrastava, un activista vestido con ropa de camuflaje se acercó a escasos metros del presidente.
Siete disparos. El agresor, un joven de 26 años no tuvo ningún impedimento para accionar su pistola de aire comprimido. Klaus se quedó petrificado, pero la peor parte se la han llevado sus guardaespaldas, que no se movieron en ningún momento. No hicieron otra cosa mas que mirar al joven alejarse sin prisas. Increíble pero cierto.
El presidente checo solo sufrió contusiones leves en el incidente, según explica la BBC. Pero si la pistola hubiese sido real, el país estaría ahora mismo de luto. Tras ser detenido, el joven de ideología comunista explicó que lo ha hecho "porque el Gobierno es sordo y ciego ante las peticiones del pueblo checo".
Vaclav Klaus ostenta el cargo desde 2003. Desde entonces, el presidente euroescéptico ha tenido otros momentos "estelares". Hace un año saltaba a la luzpolémico vídeo en el que el líder checo tras examinar un bolígrafo, se lo apropia durante una rueda de prensa con su homólogo chileno.
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