El expresidente Sócrates comparece de nuevo en los juzgados de Lisboa

    • Se espera que hoy sea interrogado como sospechoso de fraude fiscal, blanqueo de capitales y corrupción.
Segundo día de arresto de Sócrates marcado por el mutismo sobre su declaración
Segundo día de arresto de Sócrates marcado por el mutismo sobre su declaración

El ex primer ministro portugués, José Sócrates, ya está, por segundo día consecutivo, en el Campus de la Justicia de Lisboa, donde se espera que hoy sea interrogado como sospechoso de fraude fiscal, blanqueo de capitales y corrupción.

Su abogado, João Araújo, no quiso hacer declaraciones a la entrada del Tribunal Central de Instrucción Criminal, en el que también están llamados a declara los otros tres detenidos en la misma causa.

La chocante detención del ex primer ministro José Sócrates, la primera de un antiguo jefe de Gobierno en Portugal, no lo ha sido tanto si se tienen en cuenta los numerosos casos judiciales en los que salió su nombre en la última década.

El dirigente socialista, de 57 años, se ha visto cuestionado, entre otros, por el caso inmobiliario Freeport, por la dudosa obtención de su título de ingeniero en una universidad privada y por su relación con condenados en el megacaso de corrupción "Face Oculta (Cara Oculta)".

El del centro comercial Freeport, iniciado por una denuncia anónima en 2004, fue el que le dio mayores dolores de cabeza a Sócrates, que atribuyó su vinculación en este caso a una cacería política y a los "poderes ocultos".

Las licencias de construcción de este centro a las afueras de Lisboa estuvieron bajo investigación de la Fiscalía portuguesa por irregularidades de concesión que salpicaban al ex jefe de Gobierno cuando era ministro de Medio Ambiente en el año 2002.

Se investigó, concretamente, el papel de Sócrates en la atribución de las licencias de construcción en un área próxima a un espacio protegido en el estuario del Tajo.

Después de años de investigación, se acabó por dar carpetazo al asunto sin que, ni siquiera, el dirigente socialista compareciese ante la Justicia.

El título de ingeniero civil que obtuvo en los años 90 en la Universidad Independiente (UnI) fue otro asunto peliagudo en sus años de Gobierno (2005-2011).

La oposición y la prensa portuguesa especularon con que Sócrates había tenido un trato de favor en la obtención del diploma pues uno de sus profesores era militante socialista.

La propia institución, de carácter privado, tuvo incluso que ser cerrada en 2007 por el Gobierno de Sócrates por una crisis de denuncias de corrupción y enfrentamientos entre directivos, que acabó con dos de ellos en prisión preventiva.

Sócrates, que ya se había graduado como ingeniero técnico civil en los años 70 en Coimbra, tildó entonces de calumnias las insinuaciones sobre cómo había logrado el título de ingeniero y defendió su pasado de buen estudiante y su vocación de completar la formación académica aunque fuera a edad tardía (39 años).

Su nombre también circuló en el escándalo "Face Oculta", que implicó a 36 acusados por una red de tráfico de influencias, fraude, corrupción y blanqueo de dinero, entre ellos a Armando Vara, amigo de Sócrates y exministro del Gobierno de António Guterres (1995-2002).

En la investigación del caso se interceptaron cinco conversaciones telefónicas y 26 mensajes de texto entre Vara y Sócrates.

A Vara, ministro adjunto entre 1999 y 2000 y presidente del mayor banco privado, el Banco Comercial Portugués (BCP), le condenaron el pasado septiembre a cinco años de prisión efectiva por tres delitos de tráfico de influencias.

También hubo escuchas en el proceso judicial del Taguspark, que investigó las supuestas compensaciones ilícitas que la dirección de un parque tecnológico dio al exfutbolista Luis Figo para que éste apoyase la campaña electoral de Sócrates en 2009.

Sin embargo, todos los acusados por este proceso acabaron por ser absueltos en 2013.

Otro caso más con Sócrates de por medio fue el de la entrada de la operadora Portugal Telecom (PT) en Media Capital, filial de Prisa y dueña de TVI, el canal luso de más audiencia.

Con el ingreso de PT en TVI, José Sócrates, con muy buena relación con la operadora, habría orquestado un plan para que el canal suavizase las críticas a su Gobierno socialista y a su persona, según se denunció.

Ante las dudas del propio presidente de la República, el conservador Aníbal Cavaco Silva, el exdirigente socialista decidió "evitar sospechas" y vetar la entrada de PT en el canal televisivo.

Parte de la prensa local le asoció además al caso Monte Branco, una megainvestigación sobre fraude fiscal y blanqueo de capitales en la que está implicado Ricardo Salgado, antiguo líder del extinto Banco Espírito Santo (BES)

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