El presidente sursudanés, Salva Kiir, y el líder rebelde, Riek Machar, han acordado poner fin al conflicto en Sudán del Sur, según ha informado la Autoridad Intergubernamental sobre el Desarrollo (IGAD) de África Oriental.
"Las partes se han comprometido a un cese inmediato, completo e incondicional de todas las hostilidades, y a llevar la guerra a su fin", ha dicho el mediador jefe de la IGAD, Seyoum Mesfin, en una rueda de prensa.
En consecuencia con este acuerdo de paz, el que fuera ministro de Exteriores de Etiopía ha detallado que tanto Gobierno como rebeldes se han comprometido a parar los reclutamientos y las movilizaciones de tropas.
Por su parte, la IGAD ha acordado bloquear los activos e imponer restricciones de viaje a cualquier persona o grupo que viole los términos de este pacto. También ha decidido dejar de suministrar armas a las partes en conflicto.
"El IGAD urge a las partes a adoptar las medidas necesarias para intervenir en Sudán del Sur para proteger la vida de sus ciudadanos y restaurar la paz y la estabilidad", ha añadido, dando para ello a Gobierno y rebeldes un plazo de 15 días.
Representantes de Kiir y Machar han sellado así la paz tras dos días de intensas negociaciones en la capital etíope, Addis Abeba, aunque no es la primera vez: ya firmaron el pasado mes de enero un acuerdo similar que se ha violado una y otra vez.
Miles de personas han muerto desde el pasado mes de diciembre, cuando partidarios de Kiir, de la etnia dinka, y del ex vicepresidente Riek Machar, nuer, se enfrentaron por el poder en el país más joven del mundo.
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