Hay más de 46.000 cuentas de Twitter dedicadas exclusivamente a jalear la barbarie del Estado Islámico. Una cifra que podría estar incluso quedándose corta: podrían ser hasta 90.000, según los cálculos más altos. Y, durante el periodo de investigación, han sido eliminados por Twitter unas 1.000 cuentas.
Es lo que revela un estudio realizado por el Brookings Institute estadounidense, que revela además que la mayoría de dichas cuentas está situada en Siria e Irak, en los territorios controlados por el grupo extremista. El perfil del tuitero pro-EI es el de alguien que usa Android (un 69%), que tuitea en árabe, tiene muchos seguidores y es muy activo en la red, revela la investigación.
El estudio, realizado entre septiembre y diciembre del año pasado, muestra que, no sorprendendemente, tres de cada cinco tuitean en árabe, pero que uno de cada cinco de los 'tuiteros yihadistas' se decanta por comunicar en inglés.
El análisis revela además que los yihadistassuelen ser más populares que el tuitero medio: tienen, de media, unos 1.000 seguidores. Son además más activos en redes sociales que el promedio, con hasta 133.422 tuits al día procedentes de estas cuentas. Una cuenta 'media' de uno de estos usuarios manda 7,3 mensajes de media al día.
Sin embargo, es estudio apunta a que el 'éxito' que tiene el grupo yihadista en la red social se debe a un pequeño número de estas cuentas: entre 500 y 2.000 que se dedican a mandar mensajes con alta intensidad que ayudan a difundir la barbarie del grupo en las redes. La gran mayoría de las cuentas,11.902, fueron creadas en 2014 y, dentro de este año, en el mes de septiembre (3.388).En España, una cuenta proyihadista
El estudio revela que la mayoría de cuentas, fuera del territorio del 'EI' , había tuiteado desde Arabia Saudí. Con un 27%, sigue así a Siria, de donde más se tuiteó, e Irak. Después de estos países, ninguno supera el 6%. En España, según el mapa publicado por la organización, hubo una cuenta, situada en Granada, que mostró mensajes pro-EI durante ese periodo de tiempo.
La localización de dichas cuentas, una minoría dentro del total de proyihadistas, se ha obtenido a través de la geolocalización que permite la red social. Algo sorprendente, ya que implicaría un elevado riesgo de seguridad, y la propia organización terrorista había pedido a sus miembros que desactivasen la función, precisamente por seguridad.
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