La Fundación Franco considera "antidemocrática" su ilegalización

  • La Fundación espera que la medida no se lleve a cabo por respeto "a los cimientos del nuestro Estado de Derecho".
La Fundación Franco reanuda este viernes las visitas al Pazo de Meirás, canceladas por "motivos de seguridad"
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EUROPA PRESS

La Fundación Francisco Franco ha respondido a la resolución de la Eurocámara que este jueves pidió la ilegalización de las fundaciones que exalten o glorifiquen el fascismo, como es el caso de la fundación española. En un comunicado emitido este viernes ha calificado la medida como "liberticida, sectaria, antidemocrática y sin precedente".

La fundación ha destacado que durante meses "no querido contestar" a las informaciones de una hipotética ilegalización porque "no se ha producido hasta la fecha actuación gubernamental alguna encaminada a conseguir propósito semejante". Ha añadido que espera que la medida no se lleve a cabo por respeto "a los cimientos del nuestro Estado de Derecho" y asegura que "tal pretensión se situaría absolutamente al margen del orden constitucional".

Además, la Fundación Francisco Franco critica la "grosera" financiación de "las fundaciones de corte marxista e incluso bolivariano" y lamenta "el veto" a una fundación como la suya, que "cuenta con un archivo fundamental para el conocimiento" de la "historia reciente" de España, ha agregado. 

A pesar de la medida de la Eurocámara, "los hombres y mujeres que defendemos el baluarte de la verdad desde esta modesta Fundación" aseguran que no se rinden y defenderán su legalidad hasta el final. Reafirman su "confianza en la Justicia y en el orden constitucional"

El Pleno del Parlamento Europeo (PE) reclamó este jueves en una resolución pactada por varios grupos políticos del hemiciclo la ilegalización de fundaciones que exalten o glorifiquen el fascismo. Sin embargo, los cinco grupos políticos, incluidos populares y liberales, que suscribieron el texto, consensuaron no mencionar a ninguna fundación concreta o episodio fascista nacional. 

La resolución de la Eurocámara muestra la preocupación ante el aumento de la violencia neofascista en la Unión Europea tras agresiones de grupos ultras como la sufrida por la eurodiputada italiana Eleonora Forenza y su asistente por Casa Pound. 

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