En el mundo, cada año 12 millones de niñas se casan antes de los 18 años. La India es uno de los países más afectados por el matrimonio infantil, donde el 27% de las niñas son casadas antes de los 18 y el 7% antes de los 15. Son datos de la ONG "Girls not brides" ("Chicas, no novias"), que también señala la desigualdad de género, la pobreza o el nivel de educación como los factores que lo propician. El Hogar de las Niñas, ubicado en la aldea de Harispur, a tres horas de Calcuta, y dirigido por español, trabaja desde hace 10 años por revertir esta situación.
En 2007 Francisco Perelló visitó por primera vez la Residencia- Escuela “Ma Sarada Shishu Tirtha”, donde unas 100 niñas vivían hacinadas en dos edificios pequeños y muy deteriorados, "estaban acogidas, sí, pero en unas condiciones muy precarias", señala Gúzman Lago, vicepresidente de la Asociación Hogar de las Niñas, a 20Minutos. El hogar fue creado por un monje hindú hace 40 años, pero apenas contaban con recursos económicos para dar a las menores una mejor situación. Perelló decidió hacer "algo" y financió el proyecto para mejorar sus condiciones.
Dos años más tarde, en 2009, fundó en España junto a amigos colaboradores la Asociación “Hogar de las Niñas” para dar continuidad a esta labor. Ahora, tras 10 años de trabajo, el Hogar cuenta con dos espacios separados y en un estado saludable.
Aunque en la India "casi todos tienen móviles", su mejor herramienta de difusión es el boca a boca. Hasta allí llegan numerosas familias, aunque para recibir la ayuda deben contar con el certificado oficial de pobreza que otorga el gobierno y que solicita la asociación. "Suelen vivir de la tierra y no pueden educar a sus hijos ni mantenerlos en casa", cuenta Lago, quien se hace cargo de las niñas. Una vez allí, "los padres confían en nosotros porque están desesperados".
El papel de la asociación en su educación es "fundamental". Los domingos aprovechan para dar charlas a las familias sobre la educación como alternativa al matrimonio. "Las madres lo entienden muy bien pero los padres no, porque creen que su obligación es casar a sus hijas". Gracias a su hincapié en la educación han alcanzado su mayor logro: "la independencia de la mujer". "Es cierto que muchas de las niñas se han casado, explica Lago, pero tienen un oficio".
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