Estas pequeñas islas, con poco más de 50.000 habitantes, fueron el lugar elegido por Estados Unidos para realizar pruebas nucleares durante la Guerra Fría. Un grupo de investigadores de la Universidad de Columbia han descubierto que las Islas Marshall son el lugar con más radiación del mundo.
El accidente de Chernóbil y el terremoto de gran magnitud en Japón que ocasionó un desastre nuclear son las dos tragedias medioambientales más conocidas de la historia. Sin embargo, en este reciente estudio se demuestra que en algunas zonas de estas islas la radiación se encuentra en niveles mucho más altos de los esperados, hasta 1.000 veces mayores a los de los otros dos sitios.
Se ha advertido, además, que estos índices de radiación superan los niveles de seguridad establecidos en Japón, Rusia, Ucrania y Bielorrusia. Sobrepasan hasta los estándares estadounidenses, país un tanto más permisivo en torno a los niveles de radiación permitidos.
Las pruebas nucleares de las Islas Marshall fueron realizadas entre 1946 y 1958. Y la explosión más fuerte, lanzada sobre el atolón de Bikini en 1954, fue 1.000 veces más potente que la bomba de Hiroshima.
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