La moda de las revoluciones con nombres de colores y flores

  • Los expertos ya le han dado un nombre a las protestas populares de Túnez: Revolución de los Jazmines. Pero en la última década ya hemos tenido, entre otras: la Revolución de las Rosas en Georgia, la Naranja en Ucrania, la de los Tulipanes en Kirguistán o la Verde en Irán. ¿De dónde proceden estos nombres? ¿Tienen algún sentido o siguen alguna pauta?
Gases y violencia
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Parece que a lo largo del mundo se ha tomado como costumbre poner nombres de flores a las Revoluciones populares. Un artículo del diario digital Slate, explica el por qué de esta moda.

 

Hasta hace poco, estábamos acostumbrados a llamar a las revoluciones por el nombre del país en que ocurrían. Así tenemos la Revolución Americana, la Revolución Francesa o la Revolución Rusa.

 

Pero hoy en día, encontramos nombres más elaborados, como la Revolución del Terciopelo de Checoslovaquia en 1989. La revuelta que terminó con el régimen comunista, se caracterizó por ser no violenta o incluso tan suave como el terciopelo.

 

Cuando en noviembre de 2003 los georgianos tomaron la calle, consiguieron que su presidente, Eduard Shevardnadze, abandonase el poder. Los líderes de la oposición buscaron un nombre para su revolución, y el acuerdo fue conocerla como la Revolución de las Rosas.

 

El porqué está en las flores que los estudiantes dieron a los soldados durante las manifestaciones, así como la flor que llevaba el líder de la oposición, Mikhail Saakashvili, cuando pidió la renuncia de Shevardnadze en el parlamento.

 

Una vez que los checos y los georgianos comenzaron, otros líderes opositores de países ex soviéticos continuaron con la moda. Cuando los ucranianos se alzaron en 2004, se reunieron con estrategas de otros países, quiénes insistieron en la importancia del nombre que se le iba a dar la revolución. La Revolución Naranja, el color predominante de la campaña del líder opositor, Víctor Yushchenko.

 

Flores, plantas...

 

Un año después, Kirguistán tuvo su revolución, y fueron muchos los nombres que se barajaron. La Revolución del Limón era un opción, por unas declaraciones de un joven activista: "El amarillo es el color del cambio, como en los semáforos". Otras opciones: la Revolución Rosa, Revolución de la Seda, Revolución del Narciso... hasta que la prensa estableció que sería la Revolución de los Tulipanes. A diferencia de los anteriores, las razones para este nombre no están muy claras.

 

A los politólogos les hace gracia la expresión 'revoluciones de color'. Para ellos, ese concepto sería más el de 'transiciones no planificadas', y las rosas, el naranja o los tulipanes pueden ser una manera de simplificar para referirse a las revoluciones.

 

Los sucesos que terminaron con la caída de Milošević en Serbia, se conoce coloquialmente como la Revolución Bulldozer. Pese a este nombre, en ocasiones se le ha definido como una revolución de color, por las similitudes con las revueltas que hubo después en Georgia, Ucrania y Kirguistán.

 

Los claveles fueron primero

 

Pero años antes, en 1974, los portugueses se alzaron en la llamada Revolución de los Claveles, y que terminó con la dictadura de Salazar. Sin embargo, ésta revolución no se incluye en el grupo de las 'revoluciones de color', la diferencia: Portugal nunca estuvo bajo control soviético.

 

En cualquier caso, las Revoluciones de las Rosas, Naranja y del Tulipán, han tenido seguidores por todo el mundo. En 2005, los sufragistas de Kuwait comenzaron lo que algunos llamaron la Revolución Azul. Por esas fechas, el asesinato del primer ministro en Líbano, Rafik Hariri, provocó la Revolución de los Cedros.

 

Revoluciones para todos los gustos

 

Incluso el ex presidente de EEUU, George W. Bush, intentó denominar el derrocamiento de Sadam Husein como la Revolución Púrpura, por la tinta usada para evitar los votos fraudulentos durante las elecciones en Irak de 2005.

 

Los bielorrusos estuvieron a punto de llamar a su revolución de 2006 como la Revolución del Maizal (Cornflower en inglés), pero finalmente se la conoció como la Revolución de los Pantalones. Un año después otro ejemplo surgió en Birmania con la Revolución del Azafrán, y en 2009, los seguidores de Mir-Hosein Mousavi, tomaron el color de su campaña para la Revolución Verde de Irán.

 

Volviendo a las revuelta en Túnez, un bloguero ha sido el responsable del nombre que se piensa. La Revolución de los Jazmines, la planta nacional y presente en todos los mercados de la capital.

 

El artículo fue realizado con la colaboración de Lincoln A. Mitchell de la Universidad de Columbia, y J. Perkins de la Universidad de Carolina del Sur en EEUU.

 

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