Los rebeldes libios abren una página web para derrocar a Gadafi

El Consejo Nacional transitorio, órgano de gobierno de los rebeldes libios, ya tiene página webcon la que informar de todo lo que ocurra en el país. Las fuerzas contrarias a Muamar al Gadafi tratan así de contrarrestar la propaganda que el líder libio está llevando a cabo a través de los medios de comunicación en su poder.

"En esta importante coyuntura histórica que está viviendo Libia ahora mismo, nos encontramos en un momento decisivo con solo dos soluciones. O alcanzamos la libertad y luchamos por ponernos al día con los desarrollos de la humanidad y el mundo o estamos encadenados y esclavizados bajo los pies del tirano Muamar al Gadafi, donde deberemos vivir en la Historia".

Así comienza la declaración del Consejo de Transición Interino presidido por el ex ministro de Justicia, que tras el inicio de la crisis se pronunció en contra de la dureza con la que actuaba Gadafi contra el pueblo libio.

Este órgano de gobierno de los rebeldes libios con sede en Bengasi -el centro de operaciones de los alzados y segunda ciudad del país- subraya su "perseverancia en el objetivo de realojar su sede" en la capital del país, aún bajo un firme control de las tropas fieles a Gadafi.

El Consejo ha abierto su página web para "conectarse con su gente en casa y fuera y para entregar su voz al mundo exterior", explica el comunicado.

La web de los rebeldes, que se edita enárabe y en inglés, informa en el que se encuentran las revueltas. Señala las ciudades que controlan los rebeldes y los enfrentamientos que se producen en cada momento en el país.

Las redes sociales son fundamentales

Las redes sociales han jugado un papel fundamental destapándose como la mejor manera de difundir informaciones y convocar protestas. Una fuente eficaz de información frente a la censura que estos países ejercen sobre los medios de comunicación. Sin ir más lejos, durante la revolución egipcia, las redes sociales se convirtieron en la principal fuente de noticias de lo ocurrido en el país.

Tanto, que el gobierno de Mubarak llegó a paralizar durante cinco días Twitter y Facebook, para que los manifestantes no pudieran reorganizarse de manera rápida como lo hicieron en Túnez.