Un ciudadano británico que maltrataba a su familia cocinó la mascota de sus hijos, un conejo, y lo sirvió como cena para, una vez terminado el plato, anunciar a todos: “Os acabáis de comer vuestra mascota”.
La madre, que no quiso ser identificada en sus declaraciones al diario Echo, denunció esta crueldad el Día Internacional contra la Violencia de Género. En la actualidad, se está divorciando de su marido tras 15 años de turbulenta vida en común.
El día que sucedió el hecho los niños habían ido a jugar al parque, cuando el padre aprovechó para coger la mascota, al que los niños llamaba cariñosamente ‘Blackie’ (negrito), y después de matarla, proceder a despellejarla y cocinarla.La noche vomitando
Una vez hubo preparado el plato, llamó a la familia para compartir juntos el té (la merienda-cena de los británicos). Cuando terminaron, el padre les anunció lo que acababan de pasar.
Fue tal la impresión que les produjo la noticia que, según asegura la madre, pasaron todos la noche vomitando.
Se trataba de una de las muchas ocasiones en las que el padre había maltratado al resto de los miembros de la familia. La madre confesó que no había tenido valor para dejarle antes porque temía que sus hijos iban quedaran desamparados. “Siempre he sido una mujer fuerte y no me gusta rendirme; cuando tienes niños no puedes rendirte”, explicó. Esa fue la razón por la que soportó años de sufrimiento mental, físico y verbal.
En ocasiones sufría palizas tan fuertes que me quedaba en el suelo sin poder moverse. “A pesar de lo mucho que me pegaba, no era capaz de ver cómo estaba afectando a los que me rodeaban”.
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