Fundador de la empresa taiwanesa TSMC

Morris Chang, el nonagenario 'rey de los chips' que hace fortuna con la crisis

La demanda desmesurada de semiconductores por parte de las diferentes fábricas del mundo -junto con la Covid- ha provocado una crisis de suministros inédita. Un escenario ideal para los que controlan un oligopolio.

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Morris Chang, el nonagenario 'rey de los chips' que hace fortuna con la crisis.
DPA vía Europa Press

Una luz amarillenta ilumina un centro de producción de microchips en Taiwán. En su interior se encuentran centenares de trabajadores vestidos con equipos de protección blancos -para que ninguna partícula del exterior dañe la creación del nuevo chip- y decenas de maquinas, de diferentes tipos, funcionando sin parar. Esta fábrica es una más de las 17 que tiene el gigante de la producción de semiconductores TSMC repartido por todo el mundo: desde la propia isla asiática hasta EEUU. Al frente de todo este negocio, del que se nutren miles de fábricas por todo el planeta, está un rostro desconocido para el público: Morris Chang, un hombre que tiene un patrimonio de tres mil millones de euros y que el próximo 10 de julio cumplirá 91 años de edad

La Covid ha generado desequilibrios en la mayoría de los balances de las empresas del mundo. Sin embargo, en algunas compañías, como Taiwan Semiconductor Manufacturing (TSMC), esta pandemia le ha supuesto una oportunidad para incrementar sus ingresos. Así -según los datos del último trimestre de la compañía taiwanesa- alcanzó un beneficio neto récord de 5.270 millones de euros, lo que representó un incremento anual del 16,4%. Este buen dato lo achaca la compañía a "una fuerte demanda de nuestra tecnología de 5 nanómetros". Por otro lado, la empresa, a lo largo de este año, ha creado 12.302 productos diferentes usando casi 300 procesos tecnológicos diferentes, lo que le ha empujado al reconocimiento internacional.

Sin duda, la edad de Morris Chang es uno de los asuntos que más llama la atención: ¿cómo es posible que un hombre nacido en el año 1931 haya creado una de las mayores tecnológicas de la actualidad? Los orígenes de Chang están en China, donde soñaba con ser algún día escritor, una idea que fue rápidamente sacudida por su padre, que lo envió a estudiar Ingeniería Mecánica en la prestigiosa universidad de Boston, MIT. Años después, y tras licenciarse, se mudó al Oeste de los EEUU para especializarse en Ingeniería Eléctrica en la Universidad de Stanford. Tras su etapa académica, comenzó a trabajar en la empresa de semiconductores Texas Instrument, donde alcanzó el puesto de vicepresidente tras 25 años en la compañía. El Gobierno taiwanés, consciente de las aptitudes de Chang, lo llamó para que ayudara a desarrollar la industria de semiconductores en el país. Una tarea que le sedujo y que la comenzó con la fundación de TSMC.

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Morris Chang con la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen.

DPA vía Europa Press

La presencia de Chang en actos públicos no es muy común desde que se jubiló hace tres años. Sin embargo, su esencia sigue persistiendo entre los más jóvenes, donde se le observa como "el padre del éxito taiwanés". Su empresa ahora la dirigen dos hombres de su confianza que han sido educados en las mejores universidades norteamericanas: Mark Liu -que posee un doctorado en Ingeniería Eléctrica y Ciencias de la Computación en la Universidad de Berkeley- y C.C. Wei, doctor en Ingeniería Eléctrica por la Universidad de Yale. Una muestra del rigor y la seriedad que caracteriza a Chang es que no ha delegado su negocio en su único hijo, sino en dos perfiles bien preparados.

Pero TSMC no está sola en la producción de microchips, le acompañan otros dos gigantes más -la surcoreana Samsung y la norteamericana Intel- que juntos conforman un oligopolio. Un poder que empuja a fábricas de automóviles o empresas tecnológicas -como Sony o Apple- a depender de la producción que estas marquen. Lo que ha provocado que muchas de ellas -y tras la dependencia acentuada durante la crisis de suministros- hayan llevado a cabo anuncios formales para invertir en la creación de chips propios.

Unas estas decisiones empresariales que también han saltado al plano político. De hecho, las Unión Europea está preocupada por su excesiva dependencia de los chips de Taiwán, hasta el punto de que han anunciado proyectos para "cuadruplicar" la producción de semiconductores en Europa. En la actualidad hay, según confirman a este periódico fuentes de la Comisión Europea, 50 plantas dedicadas a la producción de semiconductores y en hasta 13 países distintos. Una 'guerra' que no podrá librar Chang, después de haber capeado centenares de batallas hasta haber convertido a una empresa desconocida de una isla del Pacífico en una de las principales preocupaciones de gobiernos y compañías tecnológicas.

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