Moscú defiende la presencia de militares rusos en Venezuela en apoyo de Maduro

El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, ha defendido este domingo la legalidad de la presencia de expertos militares rusos en Venezuela fundada en los acuerdos legítimos suscritos con las autoridades del país.

"Ya hemos explicado qué están haciendo nuestros militares en Venezuela, garantizando de manera puramente legítima y legal el mantenimiento de los equipos que habíamos suministrado en virtud del acuerdo intergubernamental, ratificado por el Parlamento de Venezuela, que se ajusta a la Constitución de Venezuela", ha afirmado Lavrov en declaraciones a la cadena Rossiya 1, recogidas por la agencia RIA.

Una delegación militar rusa llegó la semana pasada a Caracas para participar en una serie de consultas con las autoridades venezolanas sobre temas de cooperación en la industria de defensa, ha explicado una fuente diplomática desde la capital venezolana en declaraciones a la agencia de noticias oficial rusa, Sputnik.

El diputado opositor Williams Dávila dijo a Efe el pasado día 25 de marzo que dos aeronaves militares rusas con casi un centenar de funcionarios aterrizaron en el aeropuerto de Maiquetía, el principal del país y que sirve a Caracas, lo que consideró un hecho "grave".

"Es extraño es que venga una misión rusa contrariando por completo las disposiciones que establece la Constitución, ninguna misión puede llegar a Venezuela si no tiene la autorización de la Asamblea Nacional", afirmó en una conversación telefónica con Efe.

El miércoles, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, instó a Rusia a "salir" de Venezuela y a comienzos de semana el secretario de Estado, Mike Pompeo, denunció en una conversación telefónica con Lavrov "la continua inserción de personal militar ruso" en la nación latinoamericana.

Ya el jueves la portavoz de Exteriores rusa, Maria Zajarova, afirmó que la presencia militar rusa era totalmente legítima en el marco de los acuerdos de cooperación en defensa entre Moscú y Caracas y añadió que los soldados permanecerían en el país caribeño el tiempo que ambos gobiernos lo consideraran necesario.