Estas son las 7 promesas que hacen a las mujeres para que se unan al 'EI'

  • Les prometen que sentirán un profundo sentimiento de hermandad. El DAESH se presenta como una sociedad utópica libre de discriminación.

    Curiosamente, un ejemplo que se ofrece de ello es la poligamia, donde hasta cuatro mujeres comparten el mismo marido en un espíritu fraternal.

Estas son las 7 promesas que hacen a las mujeres para que se unan al 'EI'
Estas son las 7 promesas que hacen a las mujeres para que se unan al 'EI'

En un principio, viajaban al Estado Islámico con la esperanza de encontrar un paraíso en la tierra. Se hablaba de maridos ejemplares, de sueldos por hijo... La realidad era muy distinta a cómo se la habían imaginado.

Algunas consiguieron escapar del horror y empezaron a relatar que vivían sin derechos, maltratadas y subordinadas a un hombre. Su vida estaba marcada por el burka y el silencio.

Tras hacerse públicos sus desgarradores testimonios, sorprende que muchas mujeres sigan dejando su vida en Occidente para emigrar al territorio controlado por el Califato. Según The International Centre for Counter-Terrorism – The Hague, estas son las 7 promesas que el Estado Islámico sigue haciendo a las mujeres para que se unan a sus filas.

En primer lugar, la propaganda oficial promete a las mujeres la posibilidad de cumplir con el deber religioso que les llevará al paraíso, en esta vida, así como en el más allá. Unirse al 'EI' se presenta como una oportunidad de una vida mejor. Explican que allí las mujeres vestidas decorosamente pueden escapar de las miradas lascivas que experimentan en Occidente y vivir una vida de acuerdo con los deseos de Dios. De este modo, las mujeres pueden asegurarse un futuro brillante lleno de posibilidades.

Además, les prometen un papel central en el proceso de construcción del Estado del Califato. En él, las mujeres tienen tres funciones vitales. Se convierten estimadas esposas de guerreros valientes y justos a los cuales sólo pueden apoyar con su fuerza y valor, y mediante la realización de las tareas domésticas y la oración. Las mujeres también son clave en su papel de madres de la próxima generación, a través de los cuales se logrará el establecimiento y la supervivencia a largo plazo del Estado. Las mujeres pueden también, a través de estudios en medicina o pedagogía, convertirse en funcionarias del Estado. Podrán acceder, según les explican, de forma gratuita a los estudios, igual que a los libros, vivienda, alimentación, guardería y la sanidad. Además, a aquellas que lo hacen especialmente bien en sus estudios se les promete recompensas económicas por su arduo trabajo.

Por otro lado, los yihadistas prometen que uniéndose a ellos las mujeres también llegarán a experimentar un sentido profundo y significativo de pertenencia. Según el 'EI', todas las personas que viven en su territorio son tratadas como iguales sin importar el color de piel, nacionalidad u origen étnico. En el Califato, las mujeres estadounidenses y mujeres iraquíes son hermanas, y las mujeres de color son tan valoradas como sus hermanas blancas. Su afiliación religiosa hace que sean iguales en la tierra del Islam, y el DAESH se presenta como una sociedad utópica libre de discriminación.

En cuarto lugar, los terroristas aseguran que las mujeres que viven en la tierra controlada por ellos también experimentan un sentido de hermandad enmarcado como una verdadera y profunda amistad que supera, con mucho, a las líneas de sangre. Un ejemplo que se presenta en la propaganda oficial es la poligamia, donde hasta cuatro mujeres comparten el mismo marido en un espíritu fraternal. A través de este tipo de prácticas, para todas las mujeres, incluidas las viudas que han perdido a sus maridos en la guerra contra al-Assad y la coalición internacional, la seguridad, el honor y la dignidad están garantizadas-

A las mujeres que deciden unirse al 'EI' también se les promete una emocionante aventura. Así, el viaje a esta zona de Siria se presenta como una oportunidad de experimentar algo extraordinario. Sólo las más valientes pueden llevar a cabo esta tarea y aseguran que las cobardes de permanecer en Occidente.

Las promesas de profundo y apasionado romance igualmente se encuentran en la propaganda oficial del DAESH. Dabiq con frecuencia muestra jóvenes atractivos y fuertes, como ejemplo de los verdaderos creyentes. Las mujeres se unen a la organización terrorista pueden esperar casarse con estos hombres justos. Aquellas que viven en Occidente con hombres que son infieles a Dios deben abandonarlos y recibir a cambio abundantes recompensas, en esta vida, así como en la otra. La viuda de un mártir que viven en el Califato logra el honor más alto de todos, ya que el matrimonio trae a las mujeres un alto estatus.

Por último, a las mujeres que se unen al 'EI' se les promete una mayor influencia en la política interna de la organización terrorista, así como en la política internacional. Quieren impulsar esta influencia sometiendo a otras religiones. Un ejemplo es el de las mujeres yazidíes. El Califato gana en mano de obra a través de la esclavización de dichos grupos y, con ello, dicen, se aseguran la victoria en la batalla final.¿Y cuál es la realidad?

Según el Manifiesto, un documento difundido por el Estado Islámico que se divide en normas para las mujeres y la exaltación de la vida en Mosul (Iraq) y Raqqa (Siria), que son presentadas auténticos paraísos de justicia, estas son algunas de las normas:

El fracaso del modelo occidental para las mujeres“El modelo preferido por los infieles en Occidente fracasó en el minuto en que las mujeres fueron liberadas de su celda en el hogar (…)”“Las mujeres tienen su secreto Celestial en el sedentarismo, la quietud y la estabilidad, y los hombres son lo contrario, movimiento y fluidez, porque esa es la naturaleza del hombre (…) Si los papeles se mezclan y solapan (…) la base de la sociedad se conmueve, sus pilares se agrietan y sus paredes se derrumban”“(…) las mujeres no deberían salir para rezar, a pesar de que ello es lo más importante, especialmente porque los hombres deben salir para rezar cinco veces, día y noche”Estética“El Diablo la despoja de sus ropas, queriendo sacarla de su Paraíso de pudor y decencia, y la anima a gastar enormes sumas de dinero en cambiar la obra de Dios, pidiendo a los cirujanos que cambien la nariz, la oreja, la barbilla y las uñas (…), cosas que cuelgan de las orejas, pelo depilado en algunas partes y no en otras (…)“Esta urbanización, modernidad y moda es presentada por el Diablo en tiendas de moda y salones de belleza”.

Educación“De los siete a los nueve años, habrá tres lecciones: ley islámica y religión, árabe coránico (leído y escrito) y ciencias (contar y ciencias naturales)”“De los diez a los doce, más estudios religiosos (…), las reglas del matrimonio y el divorcio (…) Habilidades como coser y tejer y cocina básica”“De los trece a los quince, ley islámica, habilidades manuales (sobre todo lo relativo a cuidar a los hijos), y menos ciencia porque lo básico ya se habrá enseñado. Además, se enseñará historia Islámica y la vida del Profeta y sus seguidores”.

Matrimonio“Se considera legítimo para una niña casarse a los nueve años. Las chicas más puras se casarán a los 16 o 17, mientras aún son jóvenes y activas. Los hombres jóvenes no tendrán más de 20 años en estas gloriosas generaciones”Lo que está diciendo el autor (aunque no se da su nombre, a menudo escribe en primera persona) es justificar que los yihadistas se casen, es decir, utilicen sexualmente a niñas, mientras que las chicas decentes con las que formar una familia son las de 16 o 17 años.

Trabajo“Si una mujer se ve forzada a trabajar fuera de la casa, debemos recompensarla por su servicio y cuidar su hogar e hijos en su larga ausencia.“El trabajo debe ser adecuado a sus habilidades (…)“No debe exceder tres días a la semana ni durar mucho al cabo del día para que no tenga que dejar la casa mucho rtiempo”“Debe tener vacaciones”“Se le han de dar dos años de permiso de maternidad por lo menos (…)”“Debe haber un lugar en el puesto de trabajo donde dejar a los niños hasta que tengan edad escolar (…)

Labores secundarias o cómo salir de casaSolamente en casos de necesidad las mujeres pueden asumir funciones que las conversas que se suman al EI creen dadas por hechas. Así, las mujeres tan solo saldrán de casa en estos supuestos:“Si van a estudiar teología”“Las doctoras y maestras pueden salir (de casa) pero deben seguir estrictamente las directrices de la ley islámica”“Hacer la yihad. Si el enemigo está atacando su país y los hombres no son suficientes para protegerlo y los imanes dictan una fetua para ello, tal como hicieron las benditas mujeres de Iraq y Chechenia, con gran pesar (…)”

Conclusión"(...) A las mujeres de todas partes (...), no causéis vergüenza al Califato, servidlo aunque sea con una palabra"."A los enemigos del Estado Islámico, los enemigos de la castidad y la pureza, los seculares y liberales incluso entre nuestra propia gente (...) arrojad al mar el esputo de vuestra cultura, vuestra civilización y vuestro pensamiento. Dios os combate y vosotros no sois de nosotros ni nosotros somos de vosotros".

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