¿Qué tiene que ver la Gestapo con el nuevo edificio del BCE en Frankfurt?

    • La mastodóntica obra de Frank Stepper se alza sobre el skyline de la ciudad. Allí trabajan ya los 2.600 empleados del BCE.
    • El nuevo edificio ha respetado la estructura del antiguo mercado de vegetales de la ciudad. En su momento, centro de detención de judíos.
Imagen de la sede del BCE en Frankfurt
Imagen de la sede del BCE en Frankfurt

Dos torres (casi) gemelas poligonales se elevan hacia el cielo de Frankfurt. Una obra monumental de ingeniería, a orillas del río Meno, es desde hoy la nueva, y polémica, sede del BCE en la ciudad.

Espectacular, frío imponente. La nueva "casa" del organismo monetario no ha pasado desapercibida. Tampoco sus cifras, mastodónticas. 185 metros de altura en 45 plantas. 110.000 metros cuadrados. Más de 4.000 toneladas de acero.

"El símbolo de lo mejor que una Europa unida puede lograr", dijo el presidente del BCE en su inauguración. "Un magnífico nuevo hogar para que el BCE cumpla su mandato", según Draghi.

En su construcción se han empleado 12 años. Y lo más cuestionado: 1.300 millones de euros, más del 50% de lo presupuestado. Eso, pese a que su objetivo era precisamente el contrario. El organismo pretendía evitar el alquiler de las instalaciones en las que hasta ahora ha trabajado, la Eurotower, en el centro de Frankfurt, con un desmesurado coste de alquiler, 200.000 euros mensuales.

Ni se consiguió ese objetivo, ni tampoco el BCE podrá prescindir de estas oficinas. Allí trabajarán desde ahora los nuevos empleados de uno de sus departamentos de reciente creación. Es decir, el alquiler seguirá abonándose. El organismo ha justificado los sobrecostes sobre todo en el incremento del precio de la materia prima, un argumento que no ha logrado convencer a los muchos detractores.

La simbología no ha sido cuestión menor. Grandes placas de cristal en las fachadas parecen trasladar un rotundo mensaje: transparencia. Una escultura casi indescifrable corona el techo de la planta 41. ¿Qué significa?, nos preguntamos. "La idea es representar a Europa como entidad sin necesidad de distinguir el país", ha explicado el arquitecto, Frank Stepper, en varios medios. En esa planta se celebrarán las reuniones clave. A través de los ventanales, unas impresionantes vistas al horizonte alemán.

La obra es una joya de la ingeniería medioambiental. No sólo está alimentado por energías biodegradables, incluso el agua utilizada en los inodoros procede de la lluvia.

El proyecto faraónico de Stepper se ha cuidado de respetar buena parte de la estructura original. Las dos torres que se dibujan ya en el skyline de Frankfurt, están conectadas por la nave de la Grossmarkthalle, el antiguo mercado mayorista de frutas y verduras de Frankfurt, la "Catedral de los vegetales", todo un emblema de la ciudad, que, hasta 2004, abastecía a gran parte de sus habitantes.

Construido entre 1926 y 1928, fue, en su momento la estructura de hormigón armado sin columnas más grande del mundo. Su creador fue el arquitecto Martin Elsaesser, uno de los más reconocidos en Alemania y responsable de varios de los edificios más emblemáticos de la ciudad.

En este mercado, la historia escribió en cambio también uno de sus capítulos más oscuros. Desde 1941 hasta el final de la II Guerra Mundial, dejaron de venderse frutas y verduras para albergar, en sus sótanos, un centro de detención de judíos. Gestionado por la Gestapo, hasta 10.000 personas fueron recluidas allí antes de enviarlas a los campos de concentración.

Elsaesser también sufrió las consecuencias del Gobierno nacionalsocialista, del que no recibió ningún encargo, con lo que se vio obligado a realizar proyectos en otros países, como Turquía. A su regreso, en 1945, tampoco logró que se le adjudicasen nuevos diseños. Elsaesser se dedicó entonces a dar clases universitarias, hasta que falleció.

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